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viernes, marzo 29, 2024

¡Las elecciones presidenciales deben eliminarse!

Roque Benavides Ganoza, presidente de la Confederación Nacional de Instituciones Empresariales Privadas (CONFIEP), ha declarado, en una entrevista publicada en el diario El Comercio que “el gobierno está para concertar, pero principalmente para gobernar. Que el gobierno concerte, pero sobre todo que gobierne. Lo peor sería tener un Ejecutivo que no decida y un Congreso que entorpezca”. Cuando le preguntaron sobre la ampliación del régimen laboral agrario, dijo que “el régimen agrario ha sido una forma de ayudar… Hay que continuarlo”, para agregar, respecto a la aprobación de la ampliación de dicho régimen, “el Parlamento tendrá que consultar ahora con distintos estamentos de la sociedad”, para tomar una decisión.

En un foro organizado por la Asociación para el Fomento de la Infraestructura Nacional (AFIN), comentando el discurso de Sebastián Piñeira, presidente de Chile, en el sentido que la informalidad, la corrupción y el populismo son los grandes problemas de los países latinoamericanos, nuevamente Roque Benavides, comentando las expresiones de Piñeira dice, que existe mucho populismo a nivel del Ejecutivo, “haciendo referencia a las últimas discrepancias por la esperada prórroga a la Ley de Promoción del Sector Agrario”; o sea, el régimen laboral agrario del que acabamos de comentar.

¿Qué interpretación podemos sacar de las expresiones del conocido empresario? Indudablemente, ´varias lecturas´, como diría Julio César Uribe, el intelectual y filósofo del fútbol peruano. Primero, los gobiernos tienen que ejecutar las propuestas de los empresarios porque los gobiernos no deben tomar decisiones propias; hacerlo, sería promover el perverso populismo, madre del caos y el desgobierno, ideas que tienen como abanderados a Ian Alonso, Franco Giuffra y Roberto Abusada, opinólogos frecuentes del diario El Comercio a quienes leemos frecuentemente.

Una segunda ´lectura´ es que, definitivamente, hemos llegado a la comprobación brutal de que los gobiernos no nos representan. Los gobiernos toman decisiones en aspectos que no amenacen los intereses de los grandes grupos económicos, y para eso ellos tienen sus representantes en el gobierno, especialmente en el Ministerio de Economía y Finanzas, donde funciona la llamada ´puerta giratoria´, mecanismo que consiste en que los grupos económicos ponen a sus tecnócratas en el Ministerio de Ecónoma, Producción, Energía y Minas, que son sectores clave para la toma de decisiones que favorezcan a los grandes empresarios.

A Ollanta Humala “le obligaron” a poner de Ministro de Economía y Finanzas a Miguel Castilla, que era el viceministro de Mercedes Araoz, en el segundo gobierno del Apra. Igual hicieron con el Banco Central de Reserva, poniendo de presidente del directorio a Julio Velarde, para, dizque, frenar el populismo, y sigue hasta ahora. Como diríamos. ¡Horror! ¡Este es pues, nuestro país! Por eso, ¿de qué vale asistir cada cinco años a elecciones para elegir nuevos gobiernos, si ya sabemos que no gobiernan con visión de país, sino con la de los grandes grupos económicos? Martín Vizcarra y César Villanueva deben demostrarnos lo contrario Porque les pediremos cuentas al final de todo. ¡Ese es el reto!

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