El mundo de la belleza sorprende cada vez más con sus métodos de vanguardia. Uno de ellos es la rinomodelación, que permite cambiar la forma de la nariz sin necesidad de someterse a una operación y sin tener las molestias del postoperatorio. a nariz es una de las partes del cuerpo que más demandan operar los pacientes y, en su mayoría, las realizan “para mejorar su autoestima porque arrastran ese complejo durante años”.
A diferencia de pasar por el quirófano, la rinomodelación permite modificar, mediante el uso completamente certificado del Metacrill, la curvatura de la nariz, es decir, puede conseguir que una nariz aguileña tenga un contorno completamente recto e incluso permite elevar la punta de la nariz.
La ‘Doctora Fit’ explica que, antes del procedimiento, se debe estudiar la fisionomía del paciente, ya que repercute mucho en el aspecto y expresión final del rostro.El tratamiento permite afinar la punta nasal, estrechar la base de la nariz, reducir las alas nasales o impedir que la punta se baje al reír.
“El procedimiento siempre lo debe realizar un especialista. Lamentablemente, en el mundo de la belleza hay cada vez más irregularidad. Lo pacientes deben investigar la trayectoria del profesional que les realizará. No hay que dejarse sorprender porque las consecuencias pueden ser nefastas”