La semana pasada definimos la diarrea, sus síntomas, sus causas y dimos algunas recomendaciones.
Algunos mitos muy frecuentes son:
- Hay que “cortar la diarrea” utilizando fármacos.
- Cuando se tiene diarrea, se debe indicar que el niñose mantenga en ayunas.
- En un niñocon diarrea, lo mejor es ofrecerle dieta astringente.
- En un niñocon diarrea, la leche le perjudica.
MITO: LA DIARREA NO ES CONTAGIOSA
Depende de la causa de la diarrea.
Algunos gérmenes causantes de la diarrea son contagiosos.
Pueden propagarse a través de la superficie de los sanitarios o pueden contaminar las manos y extenderse a otras superficies, objetos o personas.
Si el germen entra en contacto con la boca, pasa al tracto gastrointestinal y puede contagiar la infección.
También puede trasmitirse a través del agua potable contaminada con bacterias o a través de la comida.
Para prevenir y proteger a las personas sobre la contaminación que produce diarrea, lo más importante es la higiene personal y fundamentalmente, el lavado de manos.
MITO: SE CONSIDERA DIARREA CUANDO UNA DEPOSICIÓN ES LÍQUIDA
Esta afirmación no es exacta.
El diagnóstico de diarrea solo se considera cuando se excretan heces muy blandas o líquidas que se presentan más de tres veces al día (en los bebés: más de cinco veces al día) y la cantidad de las deposiciones ascienden a más de 250 gramos al día.
Cuando se presenta solo una deposición con una consistencia diferente a la normal y a la siguiente vez que se va al baño vuelve al estado «natural», no se considera diarrea.
MITO: LA DIARREA LIMPIA EL ORGANISMO DE GÉRMENES
Esta afirmación tampoco es cierta.
La diarrea puede estar causada por agentes patógenos infecciosos, tales como virus y bacterias o puede tener causas no infecciosas (por ejemplo, el síndrome de intestino irritable o la intolerancia a la lactosa).
Una pérdida especialmente abundante de líquidos y electrolitos durante la diarrea prolongada puede provocar trastornos circulatorios.
Los agentes infecciosos se resisten al sistema inmunitario, que se ve afectado, con lo cual el cuerpo puede quedar seriamente debilitado.
Cuanto antes reinicie el intestino su función, ayudará a regenerarse.
En caso de diarrea infecciosa, los patógenos deben expulsarse del cuerpo a través de la excreción por el intestino.
La toma de medicamentos para la diarrea no debe interferir ni dificultar la excreción de estos gérmenes, por lo que, dado que la diferenciación entre un tipo de diarrea u otro no es fácil para las personas, no es recomendable tomar medicamentos salvo que el médico lo prescriba.
MITO: LOS MEDICAMENTOS CONTRA LA DIARREA NO SON APTOS PARA NIÑOS
Hay medicamentos que no se deben prescribir para lactantes o niños pequeños.
Estos incluyen algunos medicamentos que contienen loperamida, carbón activo, pectina o colestiramina.
Recién a partir de los doce años se recomienda que se puede tomar loperamida.
Sin embargo, siempre se deben seguir estrictamente las indicaciones del médico con respecto a la duración y la dosis del tratamiento.
En el caso de los niños, es especialmente importante compensar la pérdida de líquidos y electrolitos causada por la diarrea.
Por lo tanto, el niño debe estar lo suficientemente hidratado, para lo que se pueden utilizar sueros orales que contienen electrolitos y azúcares y ayudan a la rehidratación.
Dado que los niños son más susceptibles a la deshidratación que los adultos, no se debe esperar a que pasen tres días para consultar a un médico.
MITO: EL REFRESCO DE COLA Y LAS GALLETAS SALADAS AYUDAN A DETENER LA DIARREA
Frente a una diarrea prolongada, se pierden muchos electrolitos (por ejemplo, sodio o potasio) y también mucha agua.
El organismo no recibe la cantidad suficiente de ellos y pueden llegar a producirse problemas cardiovasculares.
Muchas personas tratan una diarrea aguda con el remedio casero de tomar refrescos de cola y galletas saladas porque creen que de este modo el cuerpo recupera líquidos, azúcares y sal.
Aunque probablemente, este remedio casero no sea dañino en adultos en caso de diarrea leve, no es lo más recomendable.
Las galletitas saladas no son perjudiciales, pero solo aportan cloruro de sodio (sal), mientras que el organismo también necesita reponer potasio.
Por otra parte, el contenido extremadamente alto de azúcar en los refrescos de cola no ayuda a frenar la diarrea y, además, tampoco repone los líquidos y electrolitos que el organismo pierde a través del intestino.
Por otra parte, la cafeína contenida en la cola refuerza la pérdida de potasio.
La combinación de galletas saladas y cola está poco indicada, especialmente para los niños, puesto que son más sensibles que los adultos a las pérdidas de líquidos y electrolitos.
Para compensar la pérdida de líquido durante la diarrea, mejor que los refrescos de cola y las galletitas saladas, es recomendable beber agua mineral, infusiones de hierbas o limonada alcalina (zumo de dos limones, un litro de agua, una pizca de sal, azúcar y bicarbonato).
Hasta la próxima semana.
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