La ex procuradora adjunta anticorrupción Yeni Vilcatoma, presentó un audio de una conversación que sostuvo con el ministro de Justicia Daniel Figallo, lo que le costó el cargo.
Esta conversación, dejó al descubierto las maniobras que habría hecho el titular de ese sector, Daniel Figallo, para beneficiar al prófugo empresario Martín Belaunde Lossio.
El ministro de Justicia Daniel Figallo llamó el pasado 25 de noviembre, a las 3 de la tarde, al despacho de la procuradora adjunta anticorrupción Yeni Vilcatoma a quien expuso las alternativas legales que podría beneficiar al ex amigo de la pareja presidencial.
La noche del domingo, el ministro, separó del cargo a Vilcatoma a través del canal de Estado, y son los funcionarios del gobierno, incluso la Primera Dama, quienes se horrorizan, pero no por las pretensiones del ministro, sino por lo «bajo que ha caído esta funcionaria de Estado al grabar una conversación tan comprometedora».
Las vinculaciones de la pareja presidencial a personajes de dudosa probidad, es lo que debería escandalizar a todos los peruanos, que hasta la fecha no nos aclaran situaciones como que serían amiguísimos del prófugo Belaúnde Lossio, no tener clara la situación de resguardo de Oscar López Meneses y ahora la cercanía del famoso Juan Carlos Rivera Ydrogo, más conocido como Chocherín, quien fue financista del nacionalismo.
Actitudes que lo único que logran es que los peruanos sigamos desencantándonos de la política y los que nos gobiernan, que solo demostrarían su interés de beneficios personales dejando de lado el interés general de una gran población, que se llama Perú.