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viernes, abril 19, 2024

La gran estafa: las ciclovidas

Pastillas para no dormir

Por Alonso Ocampo

Todas las municipalidades del departamento de San Martín en el último trimestre del 2012 ocasionaron caos vehicular en sus jurisdicciones al cerrar principales avenidas y jirones para promocionar una actividad, que de acuerdo a la creatividad de cada municipalidad fueron denominadas, Ciclovida, Ciclovía o Ciclodías.

Publicidad estática, radial, televisiva sirvieron para promover los eventos en Moyobamba, Tarapoto, Rioja, Juanjui, Morales, La Banda de Shilcayo, Nueva Cajamarca, sin embargo nadie pudo presagiar la dimensión de la congestión vehicular que ello ocasionaría así como tampoco el malestar de comerciantes y transportistas que vieron mermados sus ingresos ya que las principales calles de las ciudades estaban destinadas al uso peatonal

El malestar fue tanto que alcaldes, regidores y funcionarios de las municipalidades terminaron revelando que la verdadera motivación de estas jornadas de cada fin de semana era que el Ministerio de Economía y Finanzas otorgaría incentivos económicos a aquellas municipalidades que lograran destinar 2 kilómetros de vías urbanas por lo menos ocho domingos consecutivos para el uso peatonal y recreacional de sus vecinos.

Pasado el sofocón de la protesta de ciertos sectores sociales y perfeccionando las rutas alternas pronto vimos a autoridades enfundadas en shorts y polos en un intento de demostrar la práctica del deporte en su vida personal, la mentira era revelada por el intenso color blanco de sus piernas y el pobre desempeño físico mostrado. Así pues vimos a burgomaestres que por lo menos hicieron el intento de engañarnos su genuino interés por el deporte participando en una o dos ocasiones como los alcaldes de Tarapoto, Juanjui, Morales. En el caso específico de Moyobamba no recuerdo haber visto en ninguna de las fechas al alcalde Mardonio del Castillo, será posiblemente porque él prefiere trasladarse de uno a otro lugar en avión y si es al extranjero mejor.

Pues bien, han pasado dos meses desde la última jornada en nuestro departamento de esta interesante iniciativa, en poco tiempo nuestros alcaldes han olvidado todo ese súbito interés por los hábitos saludables de su población confirmando así que estas jornadas no están dentro de los planes institucionales de sus municipalidades.

Aquellos niños, jóvenes, adultos que disfrutaron el uso deportivo y recreacional de las vías públicas y que pensaron que era el inicio de planes de gobierno local que promovería espacios públicos para la práctica del deporte hoy se ven estafados al corroborar que a nuestras autoridades el deporte y su promoción les importa un carajo.

Sin embargo hay que recordar a los alcaldes que la Ley Orgánica de Municipalidades señala en su artículo 82 en los gobierno locales tienen competencias y funciones específicas en promover espacios de participación, educativos y de recreación destinados a adultos mayores de la localidad, así como también el de normar, coordinar y fomentar el deporte y la recreación de la niñez y del vecindario en general, mediante la construcción de campos deportivos y recreacionales o el empleo temporal de zonas urbanas apropiadas para dichos fines. Así que más que una decisión de cada administración edil es una obligación legal cuyo cumplimiento debería ser exigida por la población.

Todo ha sido una ilusión, nuestros alcaldes han mentido por enésima vez a su pueblo, adicionalmente se zurran sobre sus obligaciones legales, mientras ello sucede se siguen perdiendo espacios públicos como en el caso específico de Moyobamba (Parque Ayaymamam). En Tarapoto la promesa de revalorar su Concha Acústica y de dotar de mejores condiciones a la población que practica el deporte en aquel lugar es una promesa tan lejana que será mejor que los vecinos vayan olvidándose de la misma.

El poco interés de nuestras autoridades para promover el deporte y hábitos de vida saludables no deberían ser impedimento para que la sociedad civil organice este tipo de eventos, eso lo demostró un grupo de entusiastas jóvenes en Moyobamba que convocaron una bicicleteada que resultó un rotundo éxito así que habrá que retomar esa idea ya que definitivamente fuimos estafados con el cuentazo de las ciclovidas, ciclovías, ciclodía o como se llamen.

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