Juanjui. Rosita Arévalo Isuiza (29) es el nombre de una joven motocarrista que la noche del sábado 7 de octubre fue encontrada muerta tras ser asesinada por dos delincuentes en las cercanías del caserío de Shepte, comprensión del distrito de Huicungo.
Según informaron sus familiares, Rosita Arévalo que vivía en el barrio La Victoria de Juanjui, hace poco tiempo, tras sufrir ruptura conyugal, se dedicó al oficio de motocarrista como la mejor forma de sostener a sus tres hijos en edad escolar.
Al mediodía del último sábado, fue abordada en las calles de Juanjuí, por dos sujetos desconocidos que fungiendo ser “pasajeros compradores de naranja”, le pidieron una carrera a la localidad de Campanilla pero, que al parecer, la desviaron desde la carretera Fernando Belaúnde Terry hacia el trayecto que conduce a los pueblos de Miraflores y Shepte, jurisdicción del distrito de Huicungo, donde la asesinaron de un balazo para apropiarse de su vehículo y luego darse a la fuga.
Los ronderos de la zona hallaron el cadáver de la joven Arévalo Isuiza en los alrededores de Shepte tendida en el suelo y bañada en sangre; dieron aviso a la Policía de Inteligencia Criminal (SEINCRI) Juanjuí, quien luego de constituirse de inmediato al lugar del hecho, la trajeron a la Morgue a las once de la noche, en donde, hasta el cierre de esta edición, permanecía en el depósito mortuorio del Hospital MINSA, a la espera que se la practicara la necropsia.
La Policía con el Ministerio Público investigan los motivos del crimen siendo lo más probable el de robarle el vehículo. Los familiares exigen justicia y que todo el peso de la ley caiga sobre los asesinos.
Después de algún tiempo, la violencia delincuencial vuelve a manifestarse en toda su crudeza.
La población como siempre reclama acciones efectivas de las entidades responsables para terminar con ella. (Carlo Augusto Pérez)