
Rosa Tenorio Linares, es una madre de familia víctima de violencia familiar, por sus problemas no matriculó a tiempo a uno de sus hijos y ayer buscó desesperadamente apoyo para que sea considerado en un jardín de niños. Las integrantes de Manos Unidas conocieron el caso y de inmediato acudieron a la Institución Educativa Inicial 312, donde el menor fue admitido.
La directora de la Institución Educativa 312, Mónica Guevara Meléndez, manifestó que gracias a que una de las docentes que aceptó al niño en su aula, lograron matricularle al menor y de esta manera apoyaron a la madre de familia que no sabía adonde recurrir ya que en otros planteles no fue admitido, por falta de vacantes.
“En enero cerramos el proceso de matrícula, gracias a una de las profesoras que tiene 30 alumnos, el niño fue aceptado y en los siguientes días vamos a regularizar los documentos, de esta manera vamos a apoyar a la madre” sostuvo la directora Guevara Meléndez.
Manos Unidas también entregó los útiles escolares para la hija mayor que está en el nivel primario en la Institución Educativa María Ulises Dávila y se comprometieron a comprar los cuadernos y lápices que piden en la institución educativa inicial, donde estudiará el menor desde este miércoles. (Hugo Anteparra)



