
Luego de idas y vueltas, de impugnaciones, tachas, marchas y contramarchas, finalmente los sanmartinenses tenemos que elegir entre nueve candidatos, de los que sólo dos pasarán a la segunda vuelta, y dicho sea de paso, con un poderoso actor en escena, las redes sociales.
La campaña, estuvo llena de incertidumbres, lo más estable fue la inestabilidad, no dio tiempo para que los ciudadanos, por ejemplo, escuchemos debatir ampliamente a los respectivos equipos técnicos que respaldan cada una de las candidaturas, tampoco se llevó a cabo debates entre los candidatos a las vise gobernación, menos de los candidatos a las consejerías, que en su mayoría estuvieron invisibilizados.
Acudimos a las urnas este domingo 7 de octubre, habiendo escuchado más spots o leído más murales, que exposición de argumentos, y lo que aún es peor, con candidatos que hasta se dieron el lujo de no asistir a algunos debates, ya sea porque se sintieron que no tienen la capacidad de explicar con solvencia técnica ni argumentativa lo que dicen sus planes de gobierno, o porque simplemente se consideraron ganadores y por tanto, asistir a un debate es una pérdida de tiempo.
Ahora respecto a las posibilidades de los postulantes es importante analizar algunas particularidades; por ejemplo, tenemos al Dr. Bogarín, que dejó al partido aprista por Acción Regional, ganó un bolsón de votos importante, básicamente en el Alto Mayo, pero se ganó también enemigos apristas que impulsan la candidatura del ex alcalde de Moyobamba Mardonio del Castillo. No olvidar que en las elecciones pasadas el APRA quedó en segundo lugar, aunque para algunos no fue el APRA sino Mardonio, lo veremos este domingo siete.
Otro que salto de un partido a otro es Luis Neira, que para ser alcalde de la Banda de Shilcayo lo hiso por APP, ahora va por Vamos Perú; el caso de Fernando Grandez, que va por Unión Por el Perú, es diferente, pues, se decidió ir por UPP, luego de no conseguir la inscripción de su propio proyecto político; mientras que el Dr. Rolando Reátegui Lozano del MAS, no obstante haber perdido la inscripción de su movimiento en las elecciones pasadas, pero consiguió volver a inscribirse para el actual proceso electoral, lo que demuestra capacidad de reacción y de organización. Esta candidatura es de izquierda como la de Alberto Alvarado Torrejón que va por el Frente Amplio por justicia, vida y libertad.
La gestión deslucida del fujimorismo en San Martín ha entusiasmado a los Amazónicos, y constituyó una razón adicional para que el fujimorismo no tenga candidatura propia, pero se conoce que muchos de sus dirigentes han ingresado, ya sea reciclados, o de contrabando a otras tiendas políticas. César Rengifo espera pasar a la segunda vuelta, no sólo esperanzado en el recuerdo del elector de la gestión amazónica, sino poniendo en marcha la denominada ‘maquinaria verde’ que a decir de sus mentores está presente en toda la región.
Uno de los que estuvo cerca de ganar las elecciones pasadas fue Manuel Aguilar de Acción Popular, para muchos el pequeño empujón que le faltó lo obtendrá de la ex amazónica Karol Paredes, o de fujimoristas como Carlomagno Pasquel, vamos a ver, por un lado, si Karol atraerá este domingo un grueso sector amazónico y si Pasquel no termina representando una suma que resta.
Finalmente tenemos a Walter Grundel que va por el partido de los Acuña, Alianza Para El Progreso, su esperanza es repetir la avalancha de votos de su reelección a la Municipalidad Provincial de Tarapoto, esta vez a escala regional. Sus defensores lo defienden con el argumento de haber realizado una exitosa gestión municipal en Tarapoto, destacan básicamente las pavimentaciones, sus críticos le recuerdan que habiendo sido alcalde de las principales ciudades de la Amazonia no haya construido por ejemplo un buen reciento deportivo, o que no cuente con mercados adecuados, también observan que no haya realizado una gestión estrecha con el GORESAM, menos con la Cooperación Técnica Internacional.



