
Ayer jueves, el pleno del Congreso suspendió por 120 días a las congresistas Maritza García y Yesenia Ponce, las dos por mentir en sus hojas de vida. Carlos Bruce, fue sancionado con una amonestación pública y una multa equivalente a 60 días de remuneración y gastos de representación, por haber solicitado resguardo policial para la inauguración de un restaurante de su propiedad en diciembre del 2016.
Yesenia Ponce, presentó información falsa sobre sus estudios en su hoja de vida, además, fue cuestionada por el presunto pago de unos S/10 mil al ex director de un colegio para emita certificados de estudios secundarios falsos y brinde una versión que respalde su defensa.
Maritza García, presentó información falsa en su hoja de vida, sobre estudios de maestría.
Ejemplo de congresistas que tenemos que mienten y se aprovechan de su condición para obtener beneficios de entidades del Estado.
El debate es ahora sobre el referendum, dentro de otras cosas para tratar sobre la reelección congresal. Algunos indican que el porcentaje de reelegidos no es significativo y lo que debería exigirse es una mejor representación y mayores requisitos para ser representantes en el poder Legislativo, donde se aprueban leyer que deberían beneficiar a las grandes mayorías.
Lo que muchas veces podemos ver es que el Legislativo se vuelve un circo, atendiendo denuncias de congresistas que no recuerdan el nombre de sus profesores, que mienten en sus hojas de vida, que dan vergüenza en cada presentación que realizan.
Suspenderlos por 120 días no debería ser suficiente, pues vuelven a ser parte del pleno, por más demanda penal que podría haber luego, la inmunidad es parte de sus beneficios.
Tan degradado está el Congreso, que necesitamos sentirnos realmente representados. Están ahí pr la población, podrían dejar de seguir estando, también por esta misma población.



