Por Crhistian marquina
Al escuchar que dicen por ahí: “la Yoga es una filosofía oriental”, “la yoga es religión”, “mi pastor o cura me prohíbe la yoga”, “escoge entre la yoga o Dios” y tantas otras FALSEDADES de este tipo, me es triste constatar que aun reina tanta desinformación y poca cultura verdadera en gran parte de la población que por este motivo se pierde de recibir los grandes beneficios de esta CIENCIA VITAL o SISTEMA DE VIDA que es la Yoga.
En efecto, nunca nos cansaremos de repetir que la Yoga NO ES una filosofía, ni es oriental, ni es una “religión” ni jamás Cristo ni algún profeta bíblico o apóstol la ha prohibido nunca y en ninguna parte. Todas estas falacias (mentiras, falsedades) provienen sobretodo de las ganas de CANALIZAR las mentes de la gente para manejarlas bajo intereses creados (intereses económicos y de poder) utilizando imágenes, videos, o información parcializada, sesgada, e incompleta.
Por ejemplo, decir que la Yoga es oriental y principalmente de la India, obedece a tantos intereses turísticos que generan millones de dólares a este país para seguir ostentando una supremacía espiritual mundial que ya no posee (la India y el oriente ya han perdido el centro geomagnético espiritual que ahora se ha trasladado a la cordillera de los Andes y por esto el oriente está cayendo en el materialismo mientras América del Sur se espiritualiza hacia la sabiduría y dirección espiritual mundial).
TAMPOCO la Yoga es una simple filosofía puesto que no se queda en la reflexión o ejercicio del pensamiento sino que es un método concreto y práctico para vivir en UNIÓN (etimológicamente yoga significa “el acabado de la unión”, la “unión completada”) entre el hombre y el universo que lo rodea.
FINALMENTE esta unión, ligazón, conexión (yoga) no ha sido prohibida por ningún Maestro de la humanidad (Jesús o sus apóstoles, profetas, etc., Moisés, Mahoma, Buda, etc.) muy por el contrario ellos han predicado siempre la UNIÓN del hombre con el universo (desde la unión con los objetos, pasando por la unión con la sociedad, la naturaleza, el cosmos, las leyes del universo hasta la unión con la Causa Suprema de todas las cosas).
ES MÁS, el Reverendo Padre Mateo Andrés S. J. (Dr. en Filosofía de la UNIVERSIDAD GREGORIANA DE ROMA) escribió “El artículo intitulado “UN CRISTIANO ANTE EL YOGA” (reproducido en la Revista “Estudios Centro-Americanos” de mayo de 1962). El texto dice entre otras cosas: “Un monje benedictino que se decidió a practicar el método Yoga, nos dice: ‘Bien pronto, a veces desde los primeros días, la práctica de las posturas unidas a un control moderado de la respiración, se revela claramente bienhechor’…“Puede buscarse también con el YOGA una disposición mejor al cristiano para conocerse a sí mismo y ofrecerse más libre y personalmente a Dios Trino y Uno”… “al hombre de hoy, que tan fácilmente se deja perder en los acontecimientos y las cosas, en el exterior (hombre inauténtico) pocos métodos podrán ayudarle tanto a entrar, como el YOGA, practicado en su doble forma de ejercicio corporal-respiratorio y meditación personal”.
Dicho esto podemos ahora decir LO QUE SÍ ES LA YOGA y sus características reales: Yoga es un sistema de cultura integral, entendiendo por CULTURA en su acepción original que es: el CULTIVO y la FORMACIÓN del hombre, la mujer y los niños en su forma más plena y real. Yoga es una forma de vida, un método que nos lleva a vivir en armonía y conexión con las leyes universales para lograr la autorealización trascendental en una vida profundamente LIGADA a la sociedad, a la naturaleza, al ritmo con las leyes del universo que son manifestación de la voluntad de esa Causa Suprema que las genera.
Como bien lo señala el Maestre Dr. Serge Raynaud de la Ferrière: “YOGA es un SISTEMA, el Sistema un METODO, el Método: la Sublimación del SABER.” Yoga, palabra que deriva del sánscrito Yug, que significa ligadura, conexión, conformidad, ES LA CIENCIA QUE SIMPLIFICA LA UNIÓN ENTRE EL INDIVIDUO Y EL UNIVERSO.”
“Completa relajación del cuerpo y del espíritu, fuerte contracción del organismo para proporcionarle una vigorosa resistencia, profunda concentración para que el espíritu adquiera un poder de control sobre la materia, respiración dinámica rejuveneciendo el cuerpo y disciplinando el espíritu, tales son las bases de esta técnica milenaria.”
Por lo tanto invito pues a todos a beneficiarse con las grandes bondades de este sistema enseñado por especialistas de nivel internacional en el Centro Cultural de Yoga “Jñanakanda” de todas las sedes en América y Europa (en TARAPOTO: Jr. Rioja 218, Tlf. 525760.)