Grande fue la expectativa por la grata visita de la Ministra del Ambiente. Hubo esperanza que esa ilusión sea llenada de nutrida alocución sobre las políticas nacionales del actual gobierno nacional sobre este tema; pero, los asistentes salieron con desinfladas expectativas. Está bien conocer que un ladrillo es importante para construir un muro. Es bueno saber cosas pequeñas que en algún momento se convierten en grandes proyectos; pero, que las cosas pequeñas que se observan de los otros no se queden en eso, de ínfimos tamaños.
En temas ambientales existen lineamientos definidos de políticas nacionales, que deben tener tratamientos muy urgentes, que deberían haberse ejecutado no solo ayer, sino anteayer. No queda bien que un representante nacional solo cotorree trivialidades ambientales, quizá los capitalinos se imaginan que en el medio tropical hay severa carencia de masa gris, cuando en verdad, es totalmente al revés. El ejecutivo debe andar con planteamientos de políticas nacionales bajo el brazo, para socializar con las comunidades; mientras que el legislativo, si es que baja a los pueblos, debe ir con los maletines vacíos, con las orejas bien abiertas, para escuchar las propuestas de los pobladores.
El 5 de junio es el día mundial de medio ambiente. No es una fecha de alegría ambiental, es una fecha de nostalgia tropical, porque el gobierno nacional de hace nueve años, ha dispuesto el innecesario enfrentamiento entre comuneros de comunidades nativas y efectivos policiales, en un sector de la selva ¿por qué? Porque el gobierno nacional quería imponer leyes hechas en cuatro paredes, que atentaban contra la naturaleza de la selva y contra sus habitantes. Los derechos de la selva tienen que ser defendidos por todos los pobladores del país, por los demás selváticos, por los habitantes de la sierra y de la costa ¿por qué solamente por pobladores de la selva? ¿Acaso la selva es de pobladores de las comunidades nativas de la selva? ¿Se ha hecho una buena administración de justicia en este caso? ¿Cuántos comuneros nativos ingresaron a la cárcel? ¿Cuántos funcionarios del gobierno, quienes dieron la orden de ataque con armas de fuego, ingresaron a la cárcel?
Los asistentes al encuentro con la Ministra, esperaban el anuncio de la propuesta de ley para la creación del instituto nacional del suelo, porque cada día que pasa, se pierden miles y millones de toneladas de suelos del país, que en buena cuenta, en las aguas turbias de los ríos, se van las esperanzas de alimentación de poblaciones futuras de la patria. Si no hay suelo, no hay producción agropecuaria, por tanto no hay alimentos. Cada instante que se hace agricultura sin recomendaciones técnicas, no se conserva el recurso suelo de las parcelas y son las lluvias y los vientos los fenómenos climáticos encargados de llevarlos al océano por medio de los ríos achocolatados.
La otra espera fue de las miles de hectáreas de bosques vírgenes que se están perdiendo cada día a causa de la minería ilegal. Ya son miles de hectáreas destruidas y contaminadas con mercurio. Recientes informaciones dan a conocer que ahora se están ingresando a destruir las áreas de reserva de Tambopata, en donde se filmaron extraordinarios reportajes, de la belleza natural de la selva, donde se conjugan planta, animales silvestres, agua, suelo y aire. No se trata de pequeñas intervenciones, son excavaciones con retroexcavadoras, cargadores frontales, tractores de oruga, es decir de grandes maquinarias. Inicialmente, las fuerzas del orden eliminaron algunas de éstas maquinarias; pero, luego de artificios del oscurantismo, se informa que si se hace interdicción con voladuras, solo se hacen a los “caparazones” de maquinarias.
¿Por qué existe un ministerio si no toma verdadera decisión para acabar de un tajo este problema nacional? ¿Podrá un puñado de personas que infringe la ley, tener más poder que todo el Estado Nacional? ¿Cómo se puede llamar a ésta inacción? Los comuneros de las comunidades nativas asentados en aquel ambiente, claman por ésta falta de decisión política, porque no solo fueron desplazados, si no maltratados; y se informa que muchos hasta perdieron la vida. ¿Cuál es la necesidad primordial para destruir todo este ecosistema? ¿Hay necesidad primaria: alimenticia, salud, educación, vivienda? No hay ninguna necesidad, solo es ambición por el metal, así como los españoles mataron para apoderarse de oro y llevarse a España; así, los mineros ilegales hacen lo propio con la flora, el suelo, el aire, los animales que allí viven, los ríos, con las comunidades nativas, para apoderarse del oro y darse la vida mundana fácil. ¡Qué pobreza espiritual! Se tiene un comportamiento humano como si ese metal fuera endiosado. Qué pena. ¿Dónde está la política nacional del medio ambiente?