Julio Quevedo Bardález
Sólo Marciano Rengifo, salió de su ministerio sin denuncias ni juicios a su gestión, Gonzales y Pastor no tuvieron la misma suerte
En últimos años, cuatro sanmartinenses fueron ministros de Estado con diferentes gobiernos y no precisamente brillaron en el cargo, sino que enfrentaron procesos judiciales y la arremetida mediática de la prensa.
Primero hablemos de Tomás Gonzales Reátegui, quien luego de ser presidente del Consejo Transitorio de Administración Regional de Loreto, en el gobierno de Alberto Fujimori y luego de una huelga general, salió de Iquitos, para ser nombrado en 1998 como ministro de la Presidencia, donde se vio envuelto en actos de corrupción, que le valieron la cárcel, de la cual salió el 2005.
Gonzáles Reátegui, es conocido por la caracterización que le hacía Hernán Vidaurre en “Los Chistosos”, conociendo la naturaleza y se recuerda que gracias a su gestión se construyó el bulevar de la Paz de Tarapoto y la alameda Shilcayo, cuando era alcalde de la ciudad Rolando Reátegui Flores.
En el gobierno de Alejandro Toledo, Marciano Rengifo, congresista que había sido elegido por la región San Martín, fue designado como Ministro de Defensa, y en su periodo apoyó el asfaltado de dos kilómetros de la carretera Marginal Sur desde la Banda de Shilcayo, hasta Puerto Palmeras; a su salida no tuvo problemas políticos ni judiciales.
Luego fue el turno de Aurelio Pastor Valdivieso, que también como congresista, fue ministro de Justicia de Alan García, en su gestión se dio el indulto a Crousillat y los llamados “narcoindultos”, de la cual hasta ahora Pastor no sabe explicar los dos temas; cuando era ministro se construyeron dos cárceles en San Martín y una en Alto Amazonas.
Ahora César Villanueva, llega al premierato, se espera mucho de él y sobre todo, presupuestos para obras importantes; ojo que es Premier de la República y no ministro para apoyar a la región San Martín.