Activan rondas comunales
En la región San Martín se viene desarrollando el intercambio de experiencias del grupo de Trabajo de Gobernadores por el Clima y Los Bosques, asisten representantes de varios países.
El evento viene siendo promocionado a nivel nacional, sin embargo, en el valle del Chipurana un grupo de indígenas vienen luchando contra los depredadores del bosque en un territorio ancestral que lo vienen defendiendo con valor y sin el respaldo de las autoridades.
La comunidad nativa Kechua Santa Rosillo de Yanayacu está ubicada en el distrito de Huimbayoc, provincia de San Martín, lugar donde un grupo de indígenas realizan constantes patrullajes para luchar contra la tala indiscriminada de los bosques.
El apu de esa localidad Quinto Inuma Alvarado, manifiesta que son más de cinco años que vienen trabajando para resguardar más de 23 mil hectáreas que podrían desaparecer en los próximos años si no encuentran apoyo de las autoridades.
“Mucho se habla de conservar el medioambiente, sin embargo, nadie hace algo para luchar contra los traficantes de madera que cada día son muchos y nosotros no nos abastecemos para cuidar nuestros bosques, seguimos esperando que los gobernantes nos escuchen y se unan a esta lucha que es para proteger el pulmón del mundo” manifestó Inuma Alvarado.
En uno los últimos patrullajes, encontraron un árbol de tornillo de más de 40 metros que fue derribado hace unos meses, según el apu Quinto Inuma, el caso está en la fiscalía Ambiental Alto Amazonas, los traficantes de madera están haciendo de lo que se les viene en gana.
Ante esta situación los indígenas esperan la intervención de las autoridades, para luchar en favor de la conservación del bosque, ya que no confían en los funcionarios regionales, desde que empezaron su lucha aparecieron tres veces por unas denuncias que aún no están resueltas. Es por ello que hoy más que nunca los indígenas del valle del Chipurana y del Yanayacu están prácticamente solos en su lucha por conservar el medio ambiente.
Por su parte Manuel Inuma Alvarado, ex apu de Santa Rosillo de Yanayacu, manifiesta que los animales silvestres se están alejando de su zona y los ríos cada año disminuyen su caudal, es por ello que seguirán luchando a pesar de las constantes amenazas que tienen para evitar que sigan cuidando el bosque muy cerca de la Cordillera Azul, donde están las cabeceras de los ríos.
Los indígenas tienen la esperanza que los próximos gobernantes regionales y provinciales les tomen en cuenta, donde encuentran su sustento de vida y también sus medicinas ancestrales que de seguir la deforestación corren el riesgo de desaparecer en cualquier momento. “Señores autoridades no nos dejen morir por favor” exclamó Manuel Inuma. (Hugo Anteparra)