“A PESAR DE LA VIOLENCIA QUE HA SURGIDO EN LAS DOS RECIENTES DÉCADAS EN EL PERÚ, SU HISTORIA HA SIDO ESENCIALMENTE PACÍFICA Y AHORA MISMO ES UNA PEQUEÑA PARTE DE LA POBLACIÓN LA QUE SE ENTREGA AL TERRORISMO, PUES LA TOTAL MAYORÍA QUIERE PAZ, ALIMENTO Y SABER, YA QUE ES UN PUEBLO ESPONTÁNEAMENTE DOCENTE.”
Estas profundas expresiones del Maestre Dr. David Juan Ferriz Olivares, escritas en 1991, en el oriente de su ilustre vida, resuenan hoy más nunca con vibrante actualidad y evocan en nuestras mentes ese aire profético que impregnaba el pensamiento de este insigne sabio, pues nos encontramos vivenciando en Perú (y el mundo) muy álgidos días y semanas de gran conmoción, caos, violencia, enfrentamiento y enorme polarización que ¡ay! Llevan a muchos a pensar en una guerra civil (psicosis de guerra) cuando más bien y en cambio, deberíamos impulsar lo que el Maestre Dr. Serge Raynaud de la Ferrière denominaba una “PSICOSIS DE PAZ”, de comprensión, de ecuanimidad, sabiduría y diálogo que nos alejen lo más pronto del fanatismo, el odio y el miedo causados por la ignorancia (raíz de todos los males de la humanidad).
En ese sentido, debemos pues, hacer un esfuerzo supremo hacia la sabiduría que nos eleve o profundice hacia la ESENCIA ONTOLÓGICA de SER PERUANOS con su cualidad primordial ya indicada: UN PUIEBLO “ESENCIALMENTE PACÍFICO” y ESPONTÁNEAMENTE DOCENTE, que fundamentalmente se orienta hacia el SABER desde su ancestro pre-inca e inca, sumado a las altas manifestaciones de la cultura española y europea que han formado nuestro magno y magnífico mestizaje racial y cultural, sumando más recientemente las preciosas contribuciones de la raza negra, amarilla, y semítica (judía y árabe) que dan a nuestro pueblo esa característica casi EXCLUSIVA de crisol de culturas.
Este llamado hacia nuestra raíz de sabiduría es urgente para no caer en las provocaciones hacia la violencia causadas por intereses de poder, bloques económicos presionantes de las tan conocidas “ideologías agresivas” que aún carcomen la mente de las masas. Asimismo, no está de más recordar que la enorme injusticia y pobreza es causada entre otras cosas por la incapacidad de los propios gobernantes regionales que devuelven al gobierno central casi todo el dinero asignado a sus departamentos y/o lo dilapidan por la corrupción sin realizar las obras necesarias para la población que ve acrecentar su resentimiento como una olla a presión. Como bien expresa el Dr. Ferriz Olivares:
“La corrupción administrativa y gubernamental que hace que sean los gobernantes y empleados de los gobiernos los que se queden con las grandes ayudas o préstamos que facilitan los países desarrollados para beneficio de todos (…)”
Todo ello es capitalizado por quienes interesadamente quieren desviar la culpa al “centralismo”, aprovechándose de la ignorancia y resentimientos del pueblo que no se percata que es “su misma gente” que los gobierna, la culpable de su abandono social.
Continúa el autor: “En el siglo XX la barbarie se ha manifestado entre otras muchas formas, en las dos guerras mundiales, en los campos de concentración y en el terrorismo, así como en la trastocación de los valores y en la confusión de los conceptos y las ideologías.”
Y concluye iluminadora y epistemológicamente el Maestre Raynaud de la Ferrière poniendo a luz las causas profundas:
“Todos los problemas provienen de la confusión de conceptos acerca de la posición actual de la humanidad. Dicha confusión fue originada precisamente por la “cuestión espiritual”, QUE DEGENERÓ EN AQUELLAS IDEOLOGÍAS AGRESIVAS QUE COMPONEN EL FUNDAMENTO DE LOS MOVIMIENTOS MUNDIALES DE LA ACTUALIDAD. La espiritualidad ha sido reducida al aspecto puramente social, y el punto de vista de la humanidad se ve dirigido por el egocentrismo individual. De ahí vino la auto-centralización materialista, que se constituyó como patrón para servir al individuo, en relación con sus necesidades y sus deseos.”
“Ateísmo, anarquismo, socialismo, comunismo, cristianismo, teosofismo, espiritismo, todas las doctrinas son manifestadas al mundo, pero sin poder ninguna resolver los problemas porque mientras el materialismo sea el que venga a ofrecer la “receta” la humanidad decididamente no podrá evolucionar en forma verdadera.”