Desde hace un tiempo he estado tomando más consciencia de esa ley de la vida universal que hace que todo ser vivo (aún hasta los virus y priones a los que no se les considera “vivos”) surja en un medio, en un substrato, del cual esa “semilla” toma los elementos para desarrollarse, determinada siempre por la calidad de ese entorno que la acoge. Ello rige pues en el plano humano donde, desde la gestación, las cualidades genéticas de los progenitores, hasta las condiciones materiales y espirituales de la familia, van a constituir un soporte determinante del desarrollo integral que podamos alcanzar en la vida.
Como ya lo expresé anteriormente, una de las vivencias que más valoro y agradezco a Dios, como parte de ese “substrato” en el cual me ha tocado crecer, son los preciosos elementos que mis amados padres Adela y Pietro, han constituido en mi niñez, adolescencia y juventud, entre ellos la magnífica biblioteca familiar que, cual fundamento espiritual invalorable, han nutrido mi SER en el Saber.
Uno de los libros trascendentales que descubrí a los veinte años de edad, en esa magna biblioteca (además, por supuesto, de la sublime y vasta literatura de los Maestres Dr. Serge Raynaud de la Ferrière y Dr. David Juan Ferriz Olivares) es “EL DESTINO HUMANO” (1947) del sabio Pierre Lecomte du Noüy (1883-1947) genial biofísico, matemático y escritor francés, discípulo del Premio Nobel Dr. Alexis Carrel, famoso por descubrir la ECUACIÓN MATEMÁTICA DEL PROCESO DE CICATRIZACIÓN. Asimismo, destacó por sus escritos de filosofía de la ciencia, especialmente en lo que se refiere a la evolución, la unión complementaria de la ciencia y la religión, así como la teleología.
Justamente de esta temática trata “El Destino Humano”, escrito al final de su vida, obra en la cual descubrí pensamientos tan elevados que se acercan grandemente a lo que postula, y aplica sistemáticamente, la Gran Tradición Iniciática desde hace miles de años y en especial en nuestros tiempos a través de la Obra de los Maestres antes mencionados y las Instituciones Mundiales por Ellos creadas (ver: @MagnaFraternitasUniversalis) para ofrecer a las personas aquella MATESIS (Síntesis Viviente) aplicativa del Saber para la puesta en marcha de los Ideales Superiores de la Humanidad en una cultura de Paz y sabiduría por la que laboramos.
Así pues, leemos de Lecomte du Noüy: “En los dos casos, tanto en el del fanático religioso, como en el del agnóstico, nos hallamos frente a la misma debilidad humana, al mismo orgullo y el mismo error de juicio, que consiste en descuidar una mitad de la actividad psíquica del hombre. El uno niega la inteligencia, el otro la intuición. No tiene cabida en sus mentes la idea de que la personalidad humana surge de la armoniosa combinación de los dos factores.” (p.256)
“Debe buscarse la unidad de las religiones en lo que es divino, es decir, universal, en el hombre, y no en lo que es humano de las doctrinas.” (p. 189)
“El hombre evolucionando ha alcanzado una etapa en el desarrollo de su conciencia que le permite ampliar su visión y comprender por completo el magnífico papel que le corresponde como actor responsable de la Evolución. A diferencia del pólipo, que lucha a ciegas por la vida en el fondo del mar y nunca sabrá que está colocando los cimientos de un atolón de coral, que en el curso de los siglos se transformará en una isla fértil (…) Bastaría con que una mayor cantidad de gente pudiera comprenderlo, cifrar su gloria en la obra, regocijarse con ella, para que pronto tuviéramos un mundo mejor, mucho antes de que se alcance la meta espiritual.”
“Recuerde que su propia dignidad, su nobleza como ser humano debe surgir de sus esfuerzos para liberarse de las esclavitudes y obedecer sus más profundas aspiraciones. Y, sobre todo, no olvide nunca el hombre que la chispa divina está en él, sólo en él, y que es libre de descuidarla, matarla o de acercarse a Dios dando muestras de su anhelo de trabajar con Él y para ÉL.”
Para estas realizaciones prácticas de evolución y mejoramiento integral puede comunicarse al CEGEN-Centro de Estudios Generales Dr. David Juan Ferriz Olivares: celular o WhatsApp: 986348866.