Más de 173 niños se hallan desprovistos de ropas, zapatos y alimentos; no asisten a clases; las condiciones físicas y materiales de la I.E colapsaron.
Cinco personas, entre motorista y ayudantes, por poco pierden la vida ayer a horas once de la mañana al naufragar el bote motor en el que transportaban la ayuda humanitaria para los damnificados de la comunidad de Nuevo Chimbote.
El hecho ocurrió a pocos minutos de Marisol, en el Alto Huayabamba, en pleno río Shemacache cuando este grupo de personas llevaban parte de la ayuda para las 98 familias que perdieron lo todo a consecuencia de la inundación del pasado 4 de diciembre.
Las personas tuvieron que nadar y ponerse a salvo luego de arrastrar el bote hacia la orilla para evitar problemas mayores.
A decir de una de las víctimas, por poco pierden la embarcación luego de ser arrastrados por la fuerza del agua que en esa zona es de muy baja profundidad, sin embargo lograron salvarse.
Como se sabe, parte de la ayuda se encuentra almacenada en la comunidad de Marisol a 7 km de Nuevo Chimbote. Sin embargo, no puede ser entregada a los damnificados por las condiciones de la vía de acceso que ha colapsado luego de la inundación producida en la zona, lo que significa que de nada sirve la ayuda humanitaria si no llega a los beneficiarios.
Mientras eso sucedía y la tragedia parecía sumarse en esa zona del Alto Huayabamba, en Juanjui, las autoridades y jefes de sectores se reunieron para tratar sobre cómo transportar más de 7 toneladas que se encuentran en la comunidad de Marisol y que podría perderse por las condiciones del almacenamiento, las autoridades acordaron solicitar el auxilio de la Fuerza Aérea del Perú con en helicóptero y así llevar la ayuda que requiere con urgencia la población.
Esta gestión se hizo a través del Agrupamiento FAP Juanjuí y en las siguientes horas se debe conocer si el puente aéreo será posible o no . Esta es la única posibilidad que tienen las autoridades para alcanzar la ayuda.
Dato Educativo:
Más de 173 niños se hallan desprovistos de ropas, zapatos y alimentos.
Las clases escolares han sido suspendidas, colapsó la infraestructura educativa
Mientras, los docentes continúan con el trabajo de recuperación socio emocional para contrarrestar los efectos negativos que sufren los niños tras el desastre.