Ayer al mediodía llegaron a Tarapoto, los restos mortales del suboficial de la Policía Nacional de Perú, natural de San José de Sisa, que murió en extrañas circunstancias en Lima, los peritos de criminalística manejan la hipótesis que la víctima se quitó la vida con in disparo en la cabeza, mientras sus familiares creen que fue asesinado, porque no dejó una nota, donde da a conocer las razones de su fatal decisión.
Giancarlos Javier Alva Pilco de 28 años de edad, fue encontrado sin vida en el interior de su habitación, en el distrito de Independencia, fuentes policiales revelaron que recibió un impacto de bala de su propia arma de reglamento, sus vecinos manifestaron a los agentes de la División de Investigación Criminal, que no escucharon nada extraño minutos antes del disparo.
La noticia de la muerte del suboficial Alva Pilco, conmovió en Tarapoto, al personal del Departamento de Operaciones Tácticas Antidrogas, donde prestó servicios, antes de ser trasladado a Lima, para laborar en la Comisaría de San Miguel, sus compañeros coincidieron en señalar que nunca tuvo problemas con nadie y siempre decía tener vocación para ser policía, al igual que dos de sus hermanos.
Al llegar a Tarapoto, los restos mortales de Giancarlos Javier Alva, fueron trasladados al Departamento de Operaciones Tácticas Antidrogas, ubicado en el distrito de Morales, donde recibió un homenaje póstumo por parte de sus compañeros, con quienes trabajó más de dos años, horas más tarde el féretro partió a San José de Sisa, donde es velado y será sepultado en el cementerio de esa localidad.
“Nosotros no creemos que se haya suicidado, es por eso que estamos exigiendo una profunda investigación, a fin de conocer la verdad, la última llamada que realizó a sus padres, no mostraba estar deprimido” manifestó uno de los deudos. (Hugo Anteparra)