Es necesaria una acción más efectiva para cuidar la salud de los ciudadanos en la provincia…

Ayer, apenas iniciaba el día, a as 12 con 15 minutos, por fin los funcionarios del área de fiscalización de la Municipalidad Distrital de Morales, realizaron una constatación para determinar si es que existía alguna infracción de parte de la discoteca Pachanga, al emitir desde el interior ruidos molestos, tal como viene siendo denunciado por los vecinos desde que se inauguró este nuevo centro de diversion nocturna.

Es por ello, que se realizaron dos mediciones con le sonómetro debidamente calibrado, dando como resultado que el ruido a esa hora de la madrugada era de 70.8 decibelios, es por ello que atendiendo a la norma se impuso una multa a la empresa infractora equivalente a una UIT (es decir, 3950 nuevos soles).

Los inspectores, dejaron constancia que desde la mencionada discoteca se emiten ruidos molestos que estàn afectando la tranquilidad y la salud de os vecinos, que viven en dicho sector, sin tomarse en cuenta que en dicha zona existen viviendas cuya presencia es desde hace mucho tiempo.

Los funcionarios manifestaron asimismo, que a fin que la empresa infractora no sea cerrada o clausurada, deben mejorar su sistema de acústica para que los vecinos que viven en la zona no sigan siendo víctimas de los ruidos molestos.

Han referido además que el mismo sistema de fiscalización se realizará prontamente con otros establecimientos que se encuentran ubicados en la zona.

No es el único lugar
No obstante, este no es el único lugar en el que los ruidos molestos generan grandes molestias a la población, sino que además otro punto, esta vez del distrito de Tarapoto, también es conocido por la abrumadora bulla que emiten sus establecimientos de diversión. Se trata de la conocida “Calle de las Piedras”, que es la segunda cuadra del Jr. Lamas de Tarapoto, lugar en el que los establecimientos hacen competencia por ver quién hace más bulla.

Frente a esto, un conocido vecino de la zona, Rafael Saavedra, escribió lo siguiente en las redes sociales:

“Son cuatro de la mañana somos varios moradores que vivimos por la calle de las piedra zona turística de Tarapoto que tenemos que soportar la bulla día a día se hizo quejas a las autoridades correspondiente y nunca nos dieron solución yo padezco de una laberintitis hace más de un año esperan que me quede sordo para que actúen el Sr. Villacorta tiene conocimiento y nunca actuó a donde tenemos que denunciar para terminar con este problema que día a día padecemos los vecinos”.

No cabe duda que el asunto de ruidos molestos es uno de salud pública. ¿Necesitan volvernos sordos los establecimientos ubicados en esa calle para tener clientela?