Por: Lenin Quevedo Bardález
En el despacho del congresista César Yrupaílla, existe un festín de viáticos. Por lo menos dos trabajadores de dicho parlamentario, habrían hecho gastos, por decirlo de alguna manera, exagerados, con la finalidad de llegar a los 1050 nuevos soles que les permite el presupuesto nacional.
Nos referimos a Mercedes Ocampo Reátegui y Robert López López, quienes en más de una ocasión llegaron a la región San Martín en la semana de representación e hicieron gastos, por decirlo de alguna manera, sorprendentes.
El caso Robert López
No cabe duda que el restaurant favorito de Robert López es Mar y Selva, ubicado en la localidad de Alonso de Alvarado, en la carretera Fernando Belaúnde Terry. De acuerdo a los reportes, cada vez que se desplazaba por la vía, ingresaba a dicho establecimiento y gastaba entre 60 y 90 nuevos, e incluso en alguna ocasión, 85 y 98 nuevos soles el mismo día, en boletas con la numeración seguida, haciendo un total de 183, como si se tratara de un restaurant de lujo, pues como se conoce, los viáticos se gastan individualmente.
¿Cómo es así entonces que el funcionario haya hecho dichos gastos? Según Robert López “nada más puedo decir que es lo que se consume”. No obstante, el restaurant Mar y Selva, en donde realiza hasta tres visitas cada vez que llega a la región San Martín, los costos son muy altos. La otra explicación que ensaya es que se trata de boletas entregadas por montos acumulados. Queda descartado que se traten de consumos acumulados, tomando en cuenta que son un gran número de boletas las que dan cuenta de su gasto en dicho restaurant. Tomando en cuenta dicho detalle y los niveles de consumo de este funcionario, habría que pensar que Robert López es uno de los sujetos más gordos que existen en el mundo, sin embargo, es un hombre de contextura normal.
Otra de las presumibles irregularidades que descubrimos es que dicho personaje se alojaba en el Hospedaje Moyobamba, el mismo que le cobraba entre 80 y 90 nuevos soles por día, sin embargo, cuando llamamos para corroborar el costo de la habitación individual, como corresponde a una persona que duerme sola, nos dijeron que apenas llegaba a 40 nuevos soles y que incluso nos podrían hacwer descuentos corporativos. Robert López, según indicó, se sentía tan sorprendido como nosotros por este hecho, no obstante dicha versión no es creíble. ¿Es que acaso estamos frente a un caso de sobrevaluación? Después de dicha pregunta, Robert López, decidió no responder más.
Pero nuestras preguntas recién empezaban. Para sorpresa nuestra, utilizando nuevamente la modalidad de doble facturación, para cargar con viáticos, Robert López llegó hasta un humilde restaurant, el Bullas, ubicado en la cuadra nueve del Jirón Alfonso Ugarte de Tarapoto, en donde la propietaria que se negó a salir en imágenes, afirmó que de hecho, ellos habían tenido problemas en el pasado por la facturación falsa que realizaban, pero que desde hace un mes ya no lo hacían. Allí Robert López en dos boletas consecutivas supuestamente consumió 35 y 30 nuevos soles.
El caso de Mercedes Ocampo.
Si bien es cierto en el caso de Mercedes Ocampo, relacionista pública de César Yrupaílla, hay menos aristas, también hay aristas. Dicha joven, en el restaurant El Cheff, comió, con boletas correlativas, supuestamente 64 y 40 nuevos soles en monto, haciendo un total de 104 nuevos soles, mientras que en el chalet Venecia hasta 157 nuevos soles, ¿le sorprende? Claro que para todo hay una respuesta.
Según manifiesta Mercedes Ocampo, se trata de consumos acumulados, tal como indicó Robert López, sin embargo, en el siguiente caso, no tuvo cómo responder.
En una boleta del hospedaje Copacabana, se suma a los 60 del costo de la habitación otros sesenta por servicio, haciendo un total de 120 soles diarios por un hospedaje que debería costar mucho menos y gasto sobre el que Mercedes Ocampo no sabe cómo justificar. Según afirma, los costos por servicio se justifican por haber pedido cambio de fundas en las camas y para la compra de gaseosas y comida. ¿De cuándo acá se paga por pedir cambio de cortinas o de fundas en un hospedaje?