Da en verdad mucha pena ver cómo la incapacidad de los dirigentes del gobierno de lujo mandan por el tacho la posibilidad que nuestros niños ingresen nuevamente a tener clases, encontrándose cada vez más cerca de perder el año escolar. Estoy seguro que las dudas de muchos alumnos con respecto a su dirigencia, terminaron de esclarecerse a favor de la continuidad de la huelga, tras ver la negativa de la ministra de reunirse con ellos y llegar a un acuerdo que zanje el conflicto.
El resultado, policías y maestros agrediéndose en las calles, mientras los políticos siguen gastando palababras desde sus asientos. El apoyo que estaba consiguiendo el gbierno entre la comunidad también se desvanece por su torpe manejo de la crisis, mientras la lucha de los maestros se refuerza por algo que contradictoriamente para muchos padres es contraproducente: querer que la evaluación sea un simple saludo a la bandera y sigamos con una educación tan mediocre como ahora, en un país en el que el 15% de maestros no entienden lo que leen.
De hecho, es necesario que esta realidad se transforme y un primer paso sería que se eleve el presupuesto del PBI en un 6%, se cumpla con elevar el sueldo de los maestros hasta 4 mil nuevos soles y se pague la deuda social… pero para eso debe existir evaluaciones.