
Una situación sin precedentes se produce a partir de hoy en las instituciones educativas de esta provincia, al hacerse efectiva la sanción de suspensión por un mes sin goce de remuneración a 131 docentes que acataron la huelga magisterial el año pasado.
Las resoluciones de suspensión fueron firmadas por el actual director de la Unidad de Gestión Educativa Local (UGEL) Mariscal Cáceres, José Alember Cotrina Hernández y distribuidas el pasado fin de semana lo que impide a los docentes sancionados a asistir a sus centros de labores y consecuencia de ello, más de 4 mil alumnos de los niveles inicial, primaria y secundaria de Juanjui y distritos, se quedarán sin profesores quienes les dicten las clases correspondientes.
Ya en el pasado mes de marzo de este año, recibieron igual sanción algo más de 40 maestros que fueron reemplazados por personal contratado, en su mayoría estudiantes de primeros ciclos del Instituto Pedagógico Gran Pajatén, técnicos de otras especialidades como enfermería, administración o contabilidad, quienes al no tener preparación pedagógica, sólo se dedicaron a cuidar a los alumnos causando un enorme daño a su formación. El mencionado director luego fue sancionado con suspensión por parte de la Dirección Regional de Educación, pero retornó a sus labores por defectos en el procedimiento de sanción.
Hace unos días fue notificado de nuevo por una nueva sanción de suspensión por 9 meses, cosa que no se hizo anteriormente y, antes de salir del cargo, en lo que califican los maestros una revancha vengativa, pretende retirarse dejando sin sueldo y sin gratificación a esos 131 docentes, seis de los cuales ya cesaron en el cargo, causando el enorme perjuicio que esa medida tendrá en la calidad de la educación en esta provincia.
Así las cosas el servicio educativo no mejorará y peor aún, no alcanzará las metas de superación planteadas para este año. Esta medida, para muchos, no sólo afecta sus remuneraciones y gratificaciones, sino que significa una especie de muerte civil a ellos, pues durante dos años no podrán postular en los concursos para ascensos en la escala de niveles. Lo que hace que la medida adoptada por Cotrina Hernández deja una secuela de muchas aristas en la educación de esta provincia de consecuencias posteriores incalculables.
PLANTÓN Y OLLA COMÚN
En asamblea realizada por el Sindicato de Trabajadores en la Educación de Mariscal Cáceres (SITEMAC) el pasado sábado 29 de junio en la noche que reunió a más de 200 docentes entre sancionados y miembros de este sindicato, acordaron realizar a partir de hoy un plantón acompañado de olla común frente a las instalaciones de la UGEL Mariscal Cáceres, exigiendo la rápida salida de Cotrina Hernández de la dirección de la UGEL, así como del jefe de Operaciones Ulises Gómez Saavedra y Jefe de Personal Víctor Cervantes Farfán, y que se adopten medidas tendientes a revertir este enorme perjuicio a cientos de hogares tanto de docentes como de padres de familia.
Al parecer, la Ugel a través de su jefe de operaciones y de personal pretende cubrir ese vacío contratando a profesores de laboran una jornada, para que dupliquen su trabajo o poniendo a cualquier improvisado de maestro por un mes, pues el sector no cuenta con un banco de docentes y más bien hay una visible carencia de profesionales en la educación. Finalmente, hay que señalar que la actitud del director Cotrina Hernández, no sólo ha causado malestar sino también el rechazo de los sectores sindicalizados y la sociedad mariscalense.