En la presentación del plan: Turismo y comercio exterior competitivo al 2040 para el turismo en la región, ausencia de los alcaldes y falta de compromiso
VOCES entrevistó al Licenciado Víctor Linares, director de la DIRCETUR San Martín para conocer pormenores del plan sobre el turismo presentado la semana pasada en la Cámara de Comercio Turismo y Producción de Tarapoto. El Lic. Linares nos da alcances sobre el plan, muestra su extrañeza por la ausencia de los alcaldes, sobre Ricuricocha: “preocupa la decisión del concejo municipal provincial de aprobar un proyecto urbanístico que va en contra de todas las propuestas técnicas y sostenibles, parece que están tomando el camino inverso”. Sobre Sauce: “está próxima la instalación de los hitos que delimitarán la faja marginal, lo cual permitirá establecer los límites que deben respetarse”

Este programa está contemplado en tres ejes que a su vez comprenden siete estrategias. El primer eje es el de gestión, donde hemos priorizado, por ejemplo, el ordenamiento del territorio con fines turísticos, algo que no existe en el Perú. Hemos diseñado un sistema de competitividad que permite a las municipalidades tener un autodiagnóstico de cómo están, pero además saber cuál es el camino a seguir para convertir su territorio en un destino turístico, con un enfoque de competitividad.
Es, en ese sentido, una hoja de ruta clara para saber exactamente qué deben hacer. También hay una estrategia denominada Impulsa Turismo, orientada a las empresas de servicios turísticos, cuyo objetivo es acompañarlas en su proceso de formalización, mejora de calidad y fortalecimiento de capacidades del equipo humano que participa en el sector.
La estrategia San Martín Exporta está vinculada al factor de exportación: mejorar la participación en nuevos mercados, identificar productos que puedan transformarse y convertirse en nuevas posibilidades de exportación, y mejorar la articulación comercial.
Además, contamos con EnTUR San Martín, que es un espacio de gobernanza público-privado, donde se presentan avances, resultados y cuellos de botella, pero también se dialoga con la academia, el sector privado y otros actores para hacer un autodiagnóstico compartido.

Sobre la ausencia de autoridades municipales en el evento de lanzamiento del plan:
Es una llamada de atención interesante porque muestra que, lamentablemente, el turismo sigue siendo solo parte del discurso. La no participación de las autoridades revela que aún no se asume con seriedad el papel que tiene el turismo en el desarrollo regional.
Este programa no solo compromete, sino que expone la realidad, y valgan verdades, creo que en nuestra idiosincrasia nacional, si no se expone quién está actuando o dejando de actuar, no se toman cartas en el asunto.
Las herramientas del programa mostrarán tanto avances como retrocesos. Y habrá que responder, especialmente aquellos municipios que se hacen llamar turísticos. Por ejemplo, la Municipalidad Provincial de San Martín (Tarapoto) tendrá que rendir cuentas si no hay un compromiso real.
Sobre la laguna de Ricuricocha: «Los espacios naturales deben protegerse»
Ricuricocha es un importante recurso con mucho potencial, especialmente para actividades como el avistamiento de aves. Considero que se debe priorizar una inversión pública adecuada, que permita desarrollar infraestructura turística compatible con el entorno, sin alterar el ecosistema.

La orientación debe quedar clara desde la zonificación ecológica económica: aprovechar nuestros espacios para la conservación, y a partir de allí generar oportunidades de desarrollo económico.
Me preocupa la decisión del concejo municipal provincial de San Martín de aprobar un proyecto urbanístico que va en contra de todas las propuestas técnicas y sostenibles. Probablemente estén tomando el camino inverso.
Ricuricocha debe ser cuidada y protegida. Son espacios que están desapareciendo, y más bien deberíamos generar oportunidades de disfrute para la población mediante actividades recreativas y turísticas sostenibles.

Recomendaría que se replantee y se reevalúe el estado situacional. Nosotros estamos considerando incorporar a Ricuricocha en una cartera de propuestas de inversión pública en espacios naturales dentro del paisaje urbano.
Debemos evitar que se aprueben proyectos que no respeten principios de sostenibilidad, porque los daños pueden ser irreparables. Además, hay que recordar que el lugar ya ha sido reconocido como zona de conservación y recuperación de ecosistema por la Autoridad Regional Ambiental. Eso debe respetarse.
Caso Sauce: «Hay avances, pero se necesita compromiso ciudadano y empresarial»
En Sauce hemos tenido avances concretos gracias a reuniones sostenidas con diferentes actores. Lo primero es que ya está en proceso la inmovilización del recurso como ZOCRE (Zona de Conservación y Recuperación de Ecosistemas).

Es importante destacar el interés creciente del municipio por asumir la administración del lugar. Además, está próxima la instalación de los hitos que delimitarán la faja marginal, lo cual permitirá establecer con claridad los límites que deben respetarse, especialmente por parte del sector empresarial.
La Autoridad Nacional del Agua (ANA) ya viene aplicando sanciones a quienes han alterado el ecosistema, lo cual es un paso importante. También se están organizando reuniones a nivel nacional con distintos ministerios para revisar la normativa vigente y realizar ajustes que permitan ordenar las actividades que se vienen desarrollando de manera informal y desorganizada.
Aunque no es competencia directa del sector turismo, todo este desorden sí afecta al turismo. Por eso hemos decidido liderar, junto a ANA, el municipio, la Autoridad Ambiental y otros actores, una mesa de trabajo para ordenar y proteger el recurso.
Nos gustaría que los resultados sean más rápidos, pero estamos marcando una hoja de ruta. El compromiso de la población y de los empresarios locales es clave para lograr un desarrollo turístico sostenible.



