Por Willian Gallegos Arévalo
La estrategia de la iglesia católica fue el de alternar con los altos estratos de la sociedad y, en su momento, se vinculan con el Deportivo Unión, que era el equipo de la gente de alta posición social y económica en Tarapoto. De este modo, el sacerdote José Ramón Santos Iztueta Mendizábal llegaría a presidir el club Deportivo Unión, al que le cambió a Deportivo Unión Católica. Según comunicación personal de Emilio Castre Cárdenas –otro histórico jugador del equipo–, cuando se hace esa transformación el conocido locutor radial Ricardo Mori Cavero se encontraba presidiendo el Deportivo Unión. Años después seguirían más transformaciones.
Siguiendo siempre con la Unión Católica, recordamos que la defensa estaba conformada por Ghunter Arévalo Pinedo, Augusto “Maravilla· Ruíz Dávila, Alberto “Muralla” Ushiñahua, Nelsón “Carretilla brava” Fasanando, Ernesto “Cirujano” García Navarro, Jorge “Pundonor” Murrieta Pezo, Ricardo “Chiquito doble ritmo” Ríos Ramírez, Oscar “Imparable” Villacorta Saavedra y Palermo “Negro fino” Delgado Fernández. Recuerdo que un saque de cabeza de Palermo Delgado llegaba hasta la media cancha.
En la volante estaban Carlos “Sívori” Vidaurre García, Escolástico “Pirueta” Salas Grández, Víctor “Motor” Torrejón del Águila, Manuel “Cañón” Rengifo, Manuel “El Cordobés” Delgado Fernández, Julio “Brujita” Arévalo Seijas, Roger “Loretano” de la Cruz y Luques Ramírez. Esta volante tenía que ser sobria y fuerte pues los contrarios eran también poderosos, si hablamos del Cali AFA, el Huracán y el “Shuta” Boys, este que representaba al barrio Huaico, creo que, herencia del Boys Tabacones, el equipo legendario que fundaría el ingeniero Manuel del Carpio Carrión.
Carlos Vidaurre García era el entrenador del equipo. Tenía una peculiaridad especial al dirigir y es cuando se transformaba: de un tranquilo, calmado y reposado ciudadano pasaba a las expresiones fuertes. Su clásica arenga era: “¡Ya saben todos ustedes! ¡A sacarse la chucha por el equipo! Ni se les ocurra sheplequear. ¡Nadie es mejor que ustedes!”. Ya le dedicaremos un artículo especial a Carlos Vidaurre, en su papel de empresario, deportista, político y alguna vez candidato a la alcaldía de Tarapoto por el grupo Pajatén, del que también formé parte y cuando queríamos hacer una revolución en la provincia.
Conocí a casi todos los futbolistas del Unión Católica, del que fui hincha. El poderoso ataque del equipo lo formaban: Waldemar “Potencia” Oliveira Ushiñahua, Nelson Santa María Ruíz, Luis Yalta Hidalgo, Marcelino Ramírez Ramírez, Wagner “Zagalo” Chota Vásquez, Jaime “Pinocho” Gómez García, Mariano “Gambetta” Ochoa Ruíz”, Roaldo “Saeta” Alvarado Bartra y Teobaldo “Russo” Rodríguez. Palermo Delgado Fernández escribió, con referencia a esta delantera: “Casi nada. Ya quisiéramos tener ahora este equipo para sacarle la puta a cualquier adversario, a punta de goles”. (Comunicando Bosque y Cultura).