En las elecciones regionales y municipales, realizadas el último domingo, la Fiscalía de la Nación detectó 112 casos de presunta comisión del delito de suplantación de identidad de votantes. Este es uno de los delitos electorales más comunes y sanciona al infractor a una pena de cárcel que va de 1 a 4 años.
La información brindada por el Centro de Monitoreo y Alerta del Ministerio Público registra un total de 147 personas intervenidas e investigadas por la presunta comisión de ilícitos penales, de las cuales el 76% fueron conductas relacionadas al delito de suplantación de identidad, seguida por casos de publicidad ilegal del sentido del voto (7%), por efectuar propaganda electoral en las horas en que estaba prohibido (2%), por atentado al derecho al sufragio (2%), impedimento del ejercicio del derecho al sufragio (2%), disturbios (1%), entre otros.