En el marco del Día Mundial del Medio Ambiente, el Instituto de Investigaciones de la Amazonía Peruana (IIAP), adscrito al Ministerio del Ambiente, anunció avances clave en la evaluación del impacto de los residuos sólidos sobre los ecosistemas acuáticos amazónicos. El jefe del Laboratorio de Calidad Ambiental del IIAP, biólogo Werner Chota Macuyama, informó que se vienen realizando investigaciones en los ríos Itaya y Nanay, en Loreto, para analizar la contaminación del agua. El estudio incluye medición de parámetros físico-químicos como pH, oxígeno, sólidos disueltos, nitritos y nitratos, así como la detección de metales pesados como plomo, cobre, cadmio y mercurio. También se ha identificado la presencia de microplásticos.
Se evalúan además indicadores biológicos como plancton, macroinvertebrados, peces y sus parásitos para conocer el estado de la biodiversidad acuática. Según Chota, la contaminación afecta la composición de estas especies y, especialmente, la diversidad de peces, esenciales para la seguridad alimentaria. Entre los hallazgos preliminares figura la posible presencia de microplásticos en anfibios y reptiles de los ríos cercanos a Iquitos. Estos resultados serán confirmados desde julio con la llegada de equipos especializados como un microscopio y un espectrómetro infrarrojo, que permitirán identificar los polímeros y conocer su impacto en la fauna.
Los estudios también detectaron presencia de mercurio, asociado a la minería ilegal de oro. El consumo de peces contaminados con este metal puede provocar daños neurológicos graves, como temblores, pérdida de memoria y malformaciones congénitas. Estas investigaciones forman parte de un proyecto financiado por Prociencia y el IIAP, centrado en evaluar los ecosistemas acuáticos de Iquitos y Pucallpa.
Como parte de su estrategia ambiental, el IIAP entregará los resultados a las municipalidades locales para fortalecer la gestión de residuos sólidos y el tratamiento de aguas residuales. Chota advirtió que el mal manejo de residuos y la falta de plantas de tratamiento contaminan ríos, aire y suelos, afectando a la biodiversidad y a las comunidades amazónicas. Finalmente, hizo un llamado a la ciudadanía: “Cuidar nuestra casa común es responsabilidad de todos. Hagamos un esfuerzo conjunto por dejar un ambiente más limpio y saludable a las próximas generaciones”.