El fiscal penal provincial José Santos Gomero advirtió que las muertes por accidentes de tránsito se vienen incrementando en la región San Martín desde hace dos años, situación que refleja la irresponsabilidad de algunos conductores que no respetan las normas de tránsito. Según indicó, la gran mayoría de las víctimas se encontraban en estado de ebriedad al momento de los hechos, lo que agrava el panorama.
El representante del Ministerio Público también mostró su preocupación por las limitaciones que enfrenta el Instituto de Medicina Legal (IML) de Morales, donde los domingos no se realizan necropsias debido a que los médicos legistas se encuentran de retén y, bajo esa condición, no pueden cumplir con este procedimiento. Esta situación ocasiona que los levantamientos de cadáver realizados en domingo sean atendidos recién al día siguiente, como ocurrió el 21 de septiembre de 2025 en el caso del fallecido Erick Jaime Ruiz Soria.
Asimismo, Santos Gomero precisó que tampoco se brinda atención en los casos de no flagrancia los días domingo, debido a la misma condición de servicio restringido. Por ello, solicitó que se eleve este pedido al jefe Nacional del Instituto de Medicina Legal para que se disponga, en el más breve plazo, la atención de necropsias de ley y de casos de flagrancia y no flagrancia durante los domingos en toda la región.
De acuerdo con las estadísticas del Sistema Nacional de Defunciones, en 2024 se registraron en San Martín un total de 3,625 muertes, de las cuales 163 fueron violentas. Dentro de estas, 75 correspondieron a accidentes de tránsito y 31 a homicidios, siendo la provincia de San Martín la más afectada, con más de la mitad de las 139 necropsias realizadas en Tarapoto.
En lo que va el 2025, la cifra general de defunciones en la región fue de 3,281, de las cuales 163 fueron violentas: 67 por accidentes de tránsito y 26 por homicidios. Ese mismo año se realizaron 186 necropsias en las distintas Unidades Médico Legales de la región, superando a las del año anterior, con más de la mitad también ejecutadas en Tarapoto. Las cifras podrían superar lo ocurrido el 2024. Por: Hugo Anteparra