Con el lema “Cuidar el medio ambiente también es comprometernos con la obra creadora de Dios”, el Grupo de Laicos Mercedarios de la Caridad de Moyobamba llevó a cabo una significativa jornada de reforestación en la faja marginal de la carretera que conecta con el distrito de Yantaló. La actividad, realizada el miércoles 8 de octubre de 2025, consistió en la siembra de especies nativas, con el propósito de transformar este tramo en un espacio verde que aporte vida y belleza al entorno natural de la provincia de Moyobamba.
El coordinador del grupo, Félix Rosales Rojas, explicó que la jornada forma parte del plan de trabajo anual que impulsa la organización:
“Nuestro compromiso con el medio ambiente es uno de nuestros objetivos. Estas plantas recibirán el cuidado necesario hasta convertirse en árboles que aporten oxígeno y esperanza a nuestra comunidad.”
Durante la actividad, los participantes reflexionaron sobre la encíclica Laudato si’ del Papa Francisco, un texto que inspira acciones concretas de cuidado de la “casa común”. La hermana Herma Rueda García, asesora del grupo, destacó la dimensión espiritual de esta iniciativa:
“Este proyecto nos invita a comprometernos seriamente con el medio ambiente. Cuidar la casa común, esta casa que nos acoge a todos, es un reto que asumimos como grupo. En la Selva sentimos con fuerza los efectos del cambio climático. A veces cortamos árboles, pero no nos damos la tarea de plantar. Contemplar la naturaleza es también contemplar la obra creadora de Dios. Protegerla y cuidarla es una forma de honrar esa creación.”
Consultada sobre los próximos pasos, la hermana Rueda subrayó que el verdadero desafío empieza después de la siembra:
“El proyecto no termina con plantar. Nuestra responsabilidad ahora es mantener y cuidar lo sembrado hasta que crezca. Muchos se animan a sembrar, pero pocos sostienen el cuidado a largo plazo. Ese es el compromiso que ahora asumimos.”
El Grupo de Laicos Mercedarios de la Caridad de Moyobamba integra en su vida de fe un fuerte compromiso ecológico. En sus oraciones y acciones buscan promover una ecología integral, reconociendo la conexión entre el ser humano y la creación, entre uno mismo, los demás y Dios. Con iniciativas como esta, los laicos mercedarios pasan de la palabra a la acción, dejando una huella verde y espiritual en la Amazonía peruana.