María Cóndor Chuquimango es el nombre de una humilde mujer quien desde hace 10 años viene clamando justicia, ya que el padre de su menor hija, de iniciales C.R.F.C., no le ha pasado la debida pensión durante todo este tiempo.
El sujeto responde al nombre de Cecilio Frías Alarcón, de 58 años, quien se dedica al curanderismo en su natal Saposoa. Cóndor Chuquimango contó que hace once años sufría de algunas dolencias, por lo que recomendada por unos amigos acudió hasta la vivienda del mencionado curandero, quien con engaños le habría dado de tomar unos brebajes para poder sedarla y así dar rienda suelta a sus bajos instintos.
Con lágrimas en los ojos, la mujer señala que, producto de esa supuesta violación, dio a luz a su hija, y por temor a que le haga daño no denunció el hecho en ese momento. Sin embargo, Frías Alarcón aceptó reconocer a la niña y darle su apellido, más nunca le pasó dinero para su manutención.
Cóndor Chuquimango asegura que el hecho ya fue denunciado en el Juzgado de Paz Letrado de La Banda de Shilcayo, lugar donde reside actualmente, y quien resolvió aprobar la liquidación de las pensiones alimenticias por un monto de S/. 5531.75 correspondientes a los años 2015, 2016 y 2017. Sin embargo, a pesar de ello, Frías Alarcón no se ha dignado en depositar ni un sol en la cuanta de la humilde mujer, por lo que decidió hacer pública esta denuncia.
Buscamos contactarnos con Cecilio Frías Alarcón a su teléfono celular 956-551-698, pero en todo momento este se encontraba apagado.
