Le detectaron cáncer linfático, ya le practicaron quimioterapias; pero renconforta conversar con él, posee una fe inquebrantable… Fuerza profe, sabemos que saldrás de esta, siempre fuiste un zorro viejo

Julio Quevedo Bardález

Adolfo Orlando Lavi Maldonado, otrora gran jugador de fútbol, crack en el Atlético Belén de Moyobamba, cuando cursaba estudios en la Escuela Normal, donde es recordado por el memorable partido que Belén empató 1-1 con el CNI en Iquitos, y culmina su etapa futbolistica en el mítico Velarde Lozano de Tarapoto.

Como profesor es muy recordado por sus alumnos, especialmente por los de la Ex 215, incluso enseñó Educación Física en la escuela “Nuestra Señora de la Paz”.

Brillante periodista deportivo, una enciclopedia andante, y no pierde la memoria de los nombres de jugadores e incluso partidos de fútbol memorables jugados en el viejo estadio municipal de Tarapoto.

Fuerza profe
La vida aveces nos juega malas pasadas y eso le sucede actualmente al profesor Lavi, que de pronto se sintió mal.

Nos cuenta que el 24 de marzo viajó a Picota, y le hizo daño las frituritas que comió ese día y desde ese momento se sintió mal y lamentablemente en el hospital le diagnosticaron cáncer linfático.

Desde ahi empezó su odisea, fue derivado al hospital de Trujillo donde le practicaron quimioterapia.

Actualmente se encuentra postrado en el hospital EsSalud de Tarapoto, que apesar que le diagnosticaron cáncer linfático y está aislado en la cama 21 del nosocomio de los asegurados, tiene una fe inquebrantable que ganará su partido más importante que le pone la vida, indicando que cree en Dios sobre todas las cosas y deja todo en sus manos.

A pesar de la enfermedad, el profesor se encuentra lúcido y pudimos rememoriar aquel partido del Deportivo Cali de 1984 frente Capitan Clavero de Iquitos, con golazo de Linner García y un robo descarado del árbitro que dio un penal al equipo contrario al último minuto de juego.

El próximo martes nuevamente viajará a Trujillo para una nueva quimioterapia; no quiere nin- guna dádiva, sólo espera la visita de los amigos al hospital que lo fortalecerán anímicamente.

Desde este corner le decimos fuerza profe y sabemos que saldrás de esta, siempre serás un zorro viejo.