En espera inversión de más de 50 millones de soles
Despus de tener un aeropuerto operativo hasta para vuelos comerciales a Lima, Iquitos y a otras ciudades del país, los yurimagüinos ahora se limitan a observar un terminal aéreo que se cae a pedazos, partido en dos, y con limitaciones hasta para operaciones de aviones de 3 a 5 pasajeros.
El aeropuerto Moisés Benzaquen Rengifo, con una pista de 1,800 metros de longitud necesita urgente inversión del Estado para reiniciar sus operaciones, limitadas ahora a vuelos domésticos en naves de 3 a 5 pasajeros.
De los 1,800 metros de pista, sólo 800 metros se ha habilitado para las operaciones principalmente de SAETA y Aero Palcazu en la ruta Yurimaguas, Jeberos y San Lorenzo, según una fuente de Corpac Yurimaguas.
La actual situación de la pista partida en dos pone en riesgo la continuidad de las operaciones por el peligro latente del socavón realizado por la Municipalidad de Alto Amazonas como medida urgente para solucionar los problemas de estancamiento de aguas servidas y pluviales que afectaba a viviendas ubicadas en los laterales de la pista dentro de la zona que debe estar libre de obstáculos. No sólo es el socavón; la misma pista presenta grietas que ponen en riesgo el despegue y aterrizaje de las avionetas, situación inclusive advertida por Contraloría.
En una reciente reunión del MTC con las autoridades de Yurimaguas, se dio a conocer que, en la actualidad se viene actualizando el expediente técnico para el proyecto de rehabilitación de la pista de aterrizaje que comprendería, el cambio total de la carpeta asfáltica, construcción de una alcantarilla que cruza la pista (zona del socavón) y un cerco perimétrico provisional hasta que se solucione el problema social de la presencia de más de 400 edificaciones dentro de las zonas limitadoras de obstáculos, entre viviendas y torres de antenas de comunicación de particulares.
Según la información, hasta el 15 de agosto el MTC tendría el expediente actualizado para lanzar a licitación en el mes de setiembre de este año, y de manera urgente empezar con la obra de rehabilitación en el mes de diciembre.
La nueva pista de aterrizaje estaría diseñada para aeronaves de 70 pasajeros como las tiene ATSA y STAR Perú. Se espera que estas empresas puedan interesarse de ampliar sus rutas y tengan el permiso de la DGAC (Dirección General de Aeronáutica Civil).
AERÓDROMOS DE JEBEROS Y SAN LORENZO SON SIMPLES CAMPOS DE ATERRIZAJE DE AERONAVES MENORES.
Lo ocurrido en el aeródromo de Jeberos, con el secuestro de una avioneta de la empresa SAETA, nos impulsa a realizar una pregunta abierta, ¿qué tipos de seguridad hay en estos campos de aterrizajes, para el control de pasajeros, y para el aterrizaje y despegue de las naves? la respuesta es única, NADA.
No hay nada de eso; todas las actividades u operaciones para atender la demanda del transporte aéreo desde el aeropuerto de Yurimaguas hacia los campos de aterrizajes de Jeberos y San Lorenzo, se realizan con una o dos personas que están a cargo de la recepción de las naves en estos campos.
“No hay seguridad policial, ni mucho menos municipal, pues los campos son libres hasta para el tránsito de personas y vehículos menores”, señalaron a este medio pasajeros frecuentes en estas rutas.
“Los campos no tienen estabilidad porque presentan grietas, y los pilotos expertos hacen maniobras hasta temerarias para el aterrizaje y despegue” comentan los pasajeros.
Urge entonces para brindar seguridad en estos campos de aterrizaje, que la autoridad competente se haga cargo de su cuidado y administración, teniendo en cuenta la importancia de los servicios de transporte aéreo desde Yurimaguas a estos destinos.
Con todas las limitaciones existentes en la pista de aterrizaje de Yurimaguas, los vuelos no bajan de 10 a 15 diarios, según fuentes de Corpac.
Hay aeródromos en Jeberos, San Lorenzo, Palmeras, Wisun, Lagunas, Palmiche y Balsapueto, que necesitan atención del Estado.