La Comisión de Ética del Congreso no logró aprobar este lunes el informe final que recomienda sancionar a la congresista Lucinda Vásquez, natural de Tarapoto, por la presunta contratación de familiares en su despacho parlamentario. La votación, que inicialmente tenía los votos necesarios, se revirtió luego de que dos legisladores de izquierda cambiaran su posición.

Vásquez, representante de Juntos por el Perú, Voces del Pueblo y el Bloque Magisterial, enfrenta una investigación de oficio tras un reportaje de “Cuarto Poder” emitido el pasado 11 de mayo. El documento periodístico reveló que la congresista habría contratado a tres de sus sobrinos-nietos como parte de su personal de confianza: Jimmy Pinchi Pezo, coordinador del despacho, sin título universitario registrado, con sueldo de S/3,146., Edwar Rengifo Pezo, auxiliar, también sin grado académico, con remuneración superior a S/3,600, Kenyi Castro Rivas, tercer sobrino-nieto contratado.

El informe de la Comisión de Ética proponía declarar fundada la denuncia por vulneración de principios como honradez, veracidad, respeto e integridad, y recomendaba al Pleno del Congreso suspender a Vásquez por 120 días con descuento de haberes.

Sin embargo, tras un primer conteo de 4 votos a favor, 2 en contra y 3 abstenciones, las congresistas Janet Rivas (Perú Libre) y Pasión Dávila (Bancada Socialista) cambiaron su voto en contra por abstención, impidiendo la aprobación del documento. La votación se repetirá en una próxima sesión.

Contexto local:

Lucinda Vásquez, de amplia trayectoria en la región San Martín, especialmente en el sector magisterial, mantiene una base política en Tarapoto. Este caso pone en evidencia el uso de cargos públicos para el beneficio familiar, una práctica criticada por organizaciones civiles y medios locales.