Desde hace más de 7 años viene funcionando en Juanjuí una filial de la Facultad de Agroindustrias de la Universidad Nacional de San Martín (Tarapoto), filial que ya sacó una promoción de profesionales y cuenta actualmente con 90 estudiantes universitarios. La UNSM además de Juanjuí, cuenta con 4 filiales más: Rioja, Moyobamba, Lamas en el norte de región y Tocache en el sur.
La actividad principal en nuestra Provincia es la agricultura y tenemos productos banderas como el cacao, uno de los mejores del mundo sino el mejor, y las naranjas de altísima calidad a nivel nacional y necesitamos profesionales que con su conocimiento tecnológico eleven la producción y productividad de estos y otros productos nativos, porque la tierra mariscalense es excelente y generosa.
Con la nueva Ley Universitaria todas las Universidades Nacionales y Privadas tienen que adecuarse a un proceso de licenciamiento que se inició este año, que no es otra cosa que todos los centros universitarios tienen que cumplir con ciertos estándares de calidad para continuar funcionando, siendo este proceso progresivo por etapas.
La Universidad Nacional de San Martín en agosto de este año inició el proceso de licenciamiento incluyendo en el mismo a las filiales de Rioja, Moyobamba y Lamas, excluyendo inexplicablemente a la sede de Mariscal Cáceres y Tocache. Como Consejero Regional he visitado las 5 sedes y puedo afirmar fehacientemente que la filial de Juanjuí tiene la mejor infraestructura y está mejor equipada que las demás. Hay una inversión de más de 12 millones de soles en infraestructura (Campus Universitario) considerando las aulas, laboratorio, biblioteca, auditorio, comedor, oficinas administrativas y de servicios
Que la sede de la UNSM Juanjuí puede mejorarse mucho, claro que sí; pero debe hacerse poco a poco sin necesidad de cerrar la filial.
Las autoridades locales: Alcalde Provincial, los 4 Distritales, la Subprefecta Provincial, el Frente de Defensa (FREDIP-MC) y mi persona como Consejero Regional tuvimos 3 reuniones en Juanjuí y 1 en Moyobamba con el Consejo Regional de San Martín -CRSM y con las autoridades de la UNSM, sin resultado positivo; su intransigencia es temeraria, solo logramos extender las clases hasta la culminación del presente ciclo académico el 31 Diciembre 2017, pero el cierre definitivo o temporal como las autoridades universitarias dicen, será indefectiblemente a partir Enero 2018.
Esto no lo podemos permitir, en nuestra provincia lo temporal se hace permanente, sino recordemos que hasta hace más de 50 años habían vuelos aéreos de Faucett, TAN, etc., que fueron suspendidos por problemas temporales y hasta ahora no reinician. Así hay otros ejemplos más.
Debemos proteger a los estudiantes de la provincia de Mariscal Cáceres constituido en su mayoría por gente humilde de escasos recursos económicos; no podemos permitir que los desarraiguen de su lugar de origen, donde para estudiar tienen que trabajar de motocarristas, agricultores, vendedores ambulantes, dependientes, etc. ¿Y en Tarapoto quien financiará sus estudios?