Hola como están mis lectores de miércoles, regresando nuevamente en una resonancia diferente literalmente hablando. Este miércoles es algo particular, podemos precisar que faltan escasos días para la celebración del día de la madre, me imagino que en su calidad de hijo, hija, o esposo su pensamiento y su interrogante está ¿Qué vamos a regalar a mamá? eso me hace mucha falta. Hace mucho tiempo en nuestra familia los días de mamá es diferente, allí en la cama está la imagen de mamá pero en silencio nos dice que nos quiere, nos ama siente ese fervor. Pero no es el mismo ahora no siento esa celebración de mamá esa expresión maternal que entregamos como hijo.
En seguida voy a expresar todo mi sentimiento como hijo me imagino igual que algunos de ustedes están pasando esta singular situación en la familia.
Me imagino el sentimiento como hijos es inalcanzable describirla sin embargo en nombre de algunos de mis lectores atribuyo esa situación me identifico con algunos de mis lectores o amigos anónimos para escribir con algún sufrimiento.
Quiero mencionar algún instante de nuestra vida de pronto mamá se fue o mamá esta postrada en cama muchos años y no puede comunicarse como lo hacía antes. Tengo un sentimiento afanoso algunos de ustedes está viviendo estos relatos que coincide espacios de nuestra vida.
Escribo estas páginas con el desprendimiento y el fundir de mi corazón hasta llegar la parte más viva de mi carne de mis sensibles dedos que cada tecla de la máquina promueve tristeza en el alma y en mis pupilas llenan de lágrimas, de tanto sufrimiento sin llanto y con soledad de mamá.
Mamá, maestra de vocación postrada sin levantarse de la cama 12 años, por una operación al cerebro ahora simplemente le observamos su gesto suave su modo de hablar tan lento y sin entenderla percibo su mirada y su corazón ese mensaje de amor. No puedo decirle mamita “te quiero mucho” si lo digo me imagino aquella memoria que tiene siente que todavía soy niño. No sé si aquel cerebro de ella me entenderá y lo sentirá.
Hace mucho tiempo no brindar con ella como lo hacen muchos o llevarle a lindos lugares para comer pachamanca o alguna actividad que se celebra por el día de la madre. Ahora me reconcilio a sus brazos y en silencio me admira y me comunica con sus ojos dormidos de amor y ternura, ahora admiro a los niños, jóvenes y señoras que pasan incidiendo que es el día de la madre.
En los cuentos de hada se admiran personajes, yo tengo un personaje ella es Mari, mi hermana quien cuida de mamá que se parece a ella fuerte, vehemente, diplomática, exageradamente disciplinada, ella también sufre por lo que mamá se encuentra dentro de su hogar sabemos que lo hace con ese sentimiento eterno de mujer y madre, doblemente mujer por el sufrimiento de su madre y aun por concomitancia de la vida su suegro ha seguido la misma situación de mamá, si Mari ella es mi héroe familiar. Yo no sé si soy buen o mal hijo a no poder admirarla o asistirla a mamá; es que me sentía solitario sin alguien quién me apuntalara las acciones hacia ella me hacía falta una compañera una pareja que profese y cuide a mamá en la cual nunca lo tuve. Sin embargo de tanto nadar al vacío atiné con una protagonista principal y secundario de mi vida; ella es una mujer generosa y admirada a ella velo por siempre por sus sabias enseñanzas que me han hecho cambiar mi realidad, al conocer toda la historia con seguridad aceptó mi realidad y algo que sorprendió al instante aquella respuesta que iluminó mi alegría “el que ama, ama con todo” aquella persona que reverencio siempre estará a mi costado para protegerla por siempre.
Hoy es miércoles, un día de reflexión para que nuestra vida otorga sensibles vivencias de nuestra madre, felices aquellos que tenemos a mamá cerca llena de sonrisas y palabras que son tan vivas y natural.
Quiero pedir disculpas por ser individualista pero muy pocas veces lo hacemos pensamos en ustedes que tienen alguna historia similar pero ellos que pueden compartir con mamá sanita y llenos de felicidad bendecirles ese amor maternal felicidad para ellos.
Culmino estas líneas con algo que entrego a todos los hijos para las madres “Tu amor es tan fuerte que me ha permitido hallar la felicidad. Todas tus enseñanzas están grabadas en mi mente y en mi corazón querida mamá. Gracias por guiarme siempre por el buen sendero de la vida querida mamita”.