El Congreso de la República ratificó que los adolescentes de 16 y 17 años podrán ser juzgados como adultos y recibir penas de hasta cadena perpetua cuando cometan delitos graves como sicariato, extorsión, narcotráfico, secuestro, feminicidio o violación sexual.
El Pleno rechazó la reconsideración de la segunda votación del dictamen que modifica el marco legal vigente, lo que implica que los menores infractores cumplirán condena en un penal común, al igual que un adulto.
El congresista José Luna Gálvez, autor de la iniciativa, explicó que esta medida busca hacer frente a la creciente ola de violencia e inseguridad ciudadana. “Ante la crisis de inseguridad ciudadana y la ola delincuencial cada vez más violenta, no podemos mantenernos impasibles. Es necesario aplicar mano dura, sin contemplaciones”, expresó.
La norma aprobada modifica el Código Penal y el Código de Responsabilidad Penal de Adolescentes, incorporando a los adolescentes de 16 y 17 años como sujetos plenamente imputables dentro del sistema penal.
José Luna precisó que estos jóvenes podrán ser juzgados por delitos como parricidio, homicidio calificado, sicariato, feminicidio y conspiración, entre otros. Además, subrayó que la legislación también aplicará para casos de extorsión, secuestro, pandillaje y violación a menores.
Con esta decisión, el Congreso apuesta por una respuesta más severa frente al crimen organizado que utiliza a menores de edad, reforzando así el principio de autoridad frente a la criminalidad juvenil.