El viernes 30 de octubre, en las instalaciones del coliseo Chamochumbi del distrito limeño de Magdalena del Mar, el líder aprista y candidato a la presidencia de la República Alan García Pérez, dio a conocer al pueblo peruano las propuestas que enarbolará el aprismo para el desarrollo y crecimiento de nuestra patria hacia su bicentenario. Una de las propuestas que ha generado suma expectativa en la población joven es la creación del Ministerio de la Juventud y el Deporte, puesto que de ella por fin podría diseñarse las políticas rectoras en esta materia, y sobre todo porque es tomada en cuenta por nuestro líder, renovando así de manera permanente su compromiso real y concreto hacia nuestra juventud.
Las funciones en materia de juventud vienen siendo asumidas por diversas entidades públicas en sus políticas sectoriales. Lo que genera ciertos problemas para su articulación como política multisectorial. La idea central sobre esta propuesta es buscar que se oriente las acciones del Estado en materia de política juvenil a través de un solo ente rector, para que así, además se reduzca la posibilidad de duplicidad de funciones.
Lo que también se buscaría con esta trascendental propuesta es promover la participación de los jóvenes en la vida política, económica, cultural y social del país en articulación con los gobiernos regionales y locales; eliminar las sombras de pobreza y exclusión, fortalecer el liderazgo de las niñas y niños, adolescentes y jóvenes, prevenir el pandillaje y la violencia, especialmente en los adolescentes, servicios de atención integral para las adolescentes embarazadas – que muchas veces son padres y madres del hogar-, generar espacios de recreación, entre otros. Por otro lado será una inmejorable oportunidad de ponernos a la par de otras naciones desarrolladas en educación como por ejemplo en materia productiva y emprendedora de los más jóvenes, puesto que el alma de un ministerio sobre este particular es generar un crecimiento concreto en la actividad económica de los jóvenes que se integran a la PEA. Se trabajará profundamente en el programa de becas, fortalecimiento de capacidades entre otros, y esta actividad como las otras tienen el espíritu de ser descentralizadas, vale decir en coordinación y acción con los gobiernos regionales y locales.
Hay importantes ejemplos en Latinoamérica sobre la aplicación de esta política de Estado, como son: República Dominicana, México, Costa Rica y Nicaragua. También algunos otros países que se mantienen con institutos nacionales de la juventud o secretarías nacionales de la misma como Brasil, Guatemala, Uruguay, Paraguay, Ecuador; en el caso de Colombia el viceministerio, adscrito al Ministerio de Educación, entre otros.
Por una juventud llena de oportunidades y crecimiento, apoyamos decididamente la creación del Ministerio de la Juventud y el Deporte.