
Rioja. Como es de conocimiento público, la construcción del Hospital II-1 de la provincia de Rioja, viene generando cuestionamientos por parte de un sector de la población, algunos miembros del frente de defensa de los intereses de esa ciudad, quienes no presentan un sustento técnico para solicitar más número de camas de lo que contemplado en el proyecto.
Lo que viene causando suspicacias es que durante la mesa de diálogo realizado el pasado miércoles 16, la expresidenta del Frente de Defensa de los Intereses de Rioja (FEDIR) Rosana Flores Perea solicitó añadir una adenda al contrato con la empresa contratista para ampliar la obra, desconociendo que dicho proyecto cuenta con expediente técnico, presupuestado y estudio con proyección social.
Algunos pobladores mostraron su extrañeza “No queremos que se repita lo que viene sucediendo con el hospital de Moyobamba, ciertas empresas contratistas crean este tipo de problemas para generar ampliaciones de plazo y pedir los famosos adicionales, todo parece indicar que existirían intereses ocultos, hecho que debería ser investigado por el Organismo Supervisor de las Contrataciones del Estado (OSCE) y el Ministerio Público y la Defensoría del Pueblo, ya que con este pedido de ampliar el número de camas se vería beneficiado el Consorcio Hospitalario Rioja encargado de la construcción del hospital”, es más añadieron, “Resulta extraño que el residente de la obra, por parte de la empresa Contratista Ing. Ivan Welsch Moreno mantenga una relación cercana alojado en el hotel de un miembro del FEDIR”, a eso se suma que los demás miembros del frente recurren a la contratista y no al ministerio de Salud o al Gobierno Regional para obtener la información y canalizar sus demandas, creando desinformación y protestas que más parecen beneficiar interés particulares, indicaron pobladores del sector Atahualpa.