Más de 3 mil fotógrafos, redactores y reporteros de TV lo recibieron con un largo aplauso.
En la primera audiencia celebrada por el Papa León XIV en el Aula Paolo VI o Sala Nervi, con los representantes de los medios de comunicación social que trabajaron durante el cónclave informando sobre lo acontecido en la elección del nuevo representante de la Iglesia católica, afirmó: “Les agradezco el trabajo que han realizado y realizan en este tiempo, que para la Iglesia es esencialmente un tiempo de gracia”.
Más de 3 mil fotógrafos, redactores y reporteros de TV participaron y lo recibieron con un largo aplauso. El Papa sostuvo, en son de broma: “¡Gracias por esta maravillosa acogida! Dicen que los aplausos al principio no valen gran cosa. Si al final todavía estáis despiertos y queréis aplaudir, ¡muchas gracias!”
“Estáis en primera línea para narrar los conflictos y las esperanzas de paz, las situaciones de injusticia y pobreza, y el trabajo silencioso de tantos por un mundo mejor. Por eso les pido que elijan, consciente y valientemente, el camino de la comunicación pacífica”, imploró Su Santidad.
El Papa León XIV agradeció el trabajo de los medios de comunicación social y los instó a comprometerse con una comunicación diferente: “Una que no busque a toda costa el consenso, que no se disfrace con palabras agresivas ni abrace el modelo de la competencia”, exhortando: “Rechacemos el paradigma de la guerra”, también “en las palabras y en las imágenes”.
“La paz comienza con cada uno de nosotros: con la forma en que miramos a los demás, escuchamos a los demás, hablamos de los demás; y, en este sentido, la forma en que nos comunicamos tiene una importancia fundamental: debemos decir ‘no’ a la guerra de palabras y de imágenes, debemos rechazar el paradigma de la guerra”, sentenció.
El Papa expresó la solidaridad de la Iglesia con los periodistas encarcelados por decir la verdad y pidió su liberación: “El sufrimiento de estos periodistas encarcelados interpela la conciencia de las naciones y de la comunidad internacional, llamándonos a todos a salvaguardar el bien precioso de la libertad de expresión y de prensa”. Al mismo tiempo, invitó a los periodistas a contribuir a que la sociedad salga “de la confusión de lenguajes sin amor, a menudo ideológicos o sectarios”.
“Vuestro servicio, con las palabras que utilizáis y el estilo que adoptáis, es importante. La comunicación no es sólo transmisión de información, sino la creación de una cultura y de entornos –humanos y digitales– que se conviertan en espacios de diálogo y encuentro.”