En medio de un escándalo reciente que remeció al país por la inmunización adelantada contra COVID-19 de casi 500 privilegiados, el gobierno confirmó que, en otro evento, otros 66 con conexiones en la más extensa región de la Amazonía se vacunaron antes que miles de ciudadanos.
El Ministerio de Salud rechazó el miércoles lo ocurrido y ordenó una investigación para denunciar a los culpables ante la justicia.
El gobernador de la región Loreto, Elisbán Ochoa, dijo a la prensa local que “se han utilizado 66 vacunas a personas que no indicaban la relación”.
Deslindan responsabilidades:
El Director Regional de Salud Médico Carlos Calampa: “Realmente yo no tenía conocimiento de esto” Así respondió el director, quien lógicamente preocupado “el último sábado me enteré que habían vacunado al alcalde de Maynas, el lunes a otro personal que no estaba considerado y que no están en primera línea”. Hemos tomado conocimiento del caso y he pedido información por escrito a fin que se establezcan responsabilidades y tomar acciones. Ante la pregunta
¿Quiénes son los responsables del proceso de vacunación? Calampa Del Águila señala: “Estaba la doctora Karen Zevallos, pero por luto de su papá se le dejó encargada a una obstetra, Rubí Ríos y ella estuvo en ese día para la vacunación. Pero lamentablemente una funcionaria de mayor rango, tomando mi nombre vino a decir que ya estaba coordinado y vacunó a personas que no estaban en la lista. Estoy pidiendo la lista oficial al responsable de la vacunación para tomar acciones”.
Por su parte la Directora de Promoción de la Salud Lic. Clara Bustamante Pezo responde “Quien soy yo para ordenar una acción que le corresponde a la máxima autoridad regional de salud”
“El Doctor Carlos Calampa, habría dado las directrices para identificar a los posibles beneficiarios de las 66 dosis. Empezando por el alcalde de Maynas Francisco Sanjurjo, a quien incluso personal del SAMU captó en unas fotografías en la zona donde asistió para que lo vacunen pese a no estar en ninguna lista de vacunación con la dosis Pfizer y de aun contar con 69 años.
El informe (010/2021) de la Lic. Clara Bustamente, fue remitido a la dirección regional de salud, dando a conocer paso por paso los hechos ocurridos desde el viernes 19 de marzo 2021.
Luego del intercambio de opiniones y recibidas las directrices de su persona, el equipo operativo presente procedió a identificar a los posibles beneficiarios, puntualiza la licenciada en su descargo ante la dirección de salud.
La defensoría del pueblo también se pronuncia, lanza un enérgico llamado:
A través del oficio 128/2021 enviado al director de salud. “Expresarle nuestra preocupación institucional ante las irregularidades, relacionadas con el proceso de vacunación a personas adultas mayores, en las que se habría inoculado a funcionarios públicos y autoridades.
Mediante declaración del gobernador de Loreto Elisbán Ochoa Sosa, manifestó que 66 personas fueron vacunadas sin cumplir con los criterios establecidos para esta vacunación destinada a personas adultas mayores.
En acción inmediata, personal de la Defensoría del Pueblo en Loreto, acudió a recoger la información de los actores –DIRESA-
Los hechos expuestos preocupan a la Defensoría del Pueblo, toda vez que vulneran los principios, deberes y prohibiciones establecidas en la ley del código de ética de función pública, especialmente la probidad, la transparencia y la prohibición de obtener ventajas indebidas en el actuar de toda persona que desempeña un cargo o ejerce una función en la administración estatal.
En tal sentido, conforme nuestras competencias previstas en el artículo 162° de la Constitución Política, recomienda:
Primero: DISPONER el inicio de una investigación sumaria, con el objetivo de esclarecer los hechos descritos e identificar a los responsables de la vacunación a ciudadanos que no cumplían con los criterios establecidos para esta fase de vacunación.
Segundo: Con la finalidad de garantizar la TRANSPARENCIA en el proceso de vacunación en la región Loreto, RECORDAR que el derecho fundamental a la buena administración, es el derecho que tienen los ciudadanos y ciudadanas a contar con una administración eficiente, con una cultura administrativa de servicio a la persona, que prevé la calidad gerencial en el funcionamiento de los poderes públicos, en correspondencia al Estado Democrático de Derecho que se instituye y fortalece el sistema normativo y los principios Constitucionales de legalidad, dignidad humana, debido procedimiento, jerarquía normativa, seguridad jurídica, responsabilidad y transparencia”, afirma Abel Chiroque Becerra, jefe de la oficina Defensorial de Loreto.
El Diario La Región lanzó un editorial condenado los hechos: “parecía que ya habíamos visto todo, en el escenario nacional apareció quienes, aprovechándose de su poder temporal y político, decidieron privilegiarse haciendo que se les aplique la vacuna contra el Covid-19, de forma escondida, amañada, hasta dolosa e inmoral”
Cuando empezó la pandemia y más explícitamente la cuarentena en nuestro país, se dijo que esta situación de mutua autoprotección iba a sacar lo mejor de nosotros como seres humanos. Esta condición humana se comentaba que iba a aflorar en todos los lugares donde el Covid-19 ingresara, pero, la verdad que nos quedamos con las ganas de ver estas conductas íntegras de solidaridad y nobles sentimientos masivos.
Si bien se han dado muchas muestras de apoyo, de ayuda a los más necesitados, de colaboración mutua, vale decir de solidaridad; también hemos visto las actitudes más perversas que hubieras podido imaginar.
Hasta se podría decir que fueron sacadas de una película de terror, donde la realidad se confundía con la ficción, nada de eso, era real y cruel. Estaban por ahí los comercializadores de medicinas a precios altamente escandalosos, el oxígeno, y tantos indicios de corrupción en torno a las adquisiciones relacionadas a la lucha contra el virus.
Y cuando parecía que ya habíamos visto todo, en el escenario nacional apareció quienes, aprovechándose de su poder temporal y político, decidieron privilegiarse haciendo que se les aplique la vacuna contra el Covid-19, de forma escondida, amañada, hasta dolosa e inmoral.
Y cuando la investigación sobre este espinoso e indignante tema sigue su curso, y parecía que la lección del error cometida por los políticos y autoridades de rango nacional, se había asimilado en el sentido de no caer en este tipo de actitudes, se destapa una versión iquiteña.
Sucedió en esta ciudad capital de la región y que no se manche el nombre de la región pretendiendo decir que Iquitos es todo Loreto. Ocurrió con gente de Iquitos, con ciertos personajes más preparados, más centrados en discernir las acciones buenas y malas, por decirlo y contraponerlo de alguna forma.
Es cierto que todos queremos protegernos, pero se ha establecido prioridades y se deben respetar, y no caer en el error de aprovecharse del cargo o del poder actual. Una decepción más del pueblo y la afirmación de que el poder “marea” y la certeza que no sabemos todavía lo que es el espíritu de la democracia como forma de gobierno, sin aprovechamientos de ningún tipo, y el pueblo sigue siendo el oprimido por quienes alardean defenderlo.