La informalidad sigue siendo una de las principales barreras para el desarrollo de las micro y pequeñas empresas (mypes) en el Perú. Según el informe “Las micro y pequeñas empresas en el Perú: Resultados en 2024”, elaborado por Comex Perú, las regiones de Piura, Loreto, Cajamarca, Ayacucho y Puno encabezan la lista de departamentos con mayor nivel de informalidad empresarial. Estas cinco regiones, ubicadas en la costa, sierra y selva, presentan condiciones que limitan el acceso de las mypes a servicios básicos, registros contables y empleo formal.
En contraste, las regiones de Lima, San Martín, Moquegua, Arequipa y Cusco registran los niveles más bajos de informalidad, aunque todas superan el 83%, lo que evidencia que incluso en zonas con mejor infraestructura o desarrollo económico, la formalización aún no se consolida.
El informe también advierte que el Índice de Capacidad Formal (ICF) —una medida que evalúa la posibilidad de que las mypes operen formalmente— cayó 0.8% en 2024, retrocediendo 2.1% en comparación con el nivel registrado en 2019. Esta caída afecta a todos los sectores: las empresas de producción disminuyeron su capacidad formal en 1.7%, las de comercio en 1.2% y las de servicios en 0.1%.
Las diferencias regionales en formalización también son significativas. Moquegua lidera el ranking de ICF con un puntaje de 0.295, seguida por Ica (0.284), Pasco (0.263), San Martín (0.260) y Áncash (0.257). En el otro extremo, Tacna (0.234), Huancavelica (0.231), Tumbes (0.219), Ayacucho (0.215) y Huánuco (0.214) presentan los niveles más bajos, reflejando las desigualdades estructurales entre regiones.
A pesar de que el número de mypes operativas creció ligeramente en 2024 —con un aumento del 0.6% respecto al año anterior—, este crecimiento no se tradujo en mejoras económicas. Las ventas totales cayeron 0.8% y la participación de las mypes en el Producto Bruto Interno (PBI) nacional disminuyó en 1.4 puntos porcentuales.
Por sectores, el rubro de servicios concentra la mitad de las mypes, con un crecimiento del 2.5% en número de negocios. Comercio y producción también crecieron 1.9% y 0.8%, respectivamente. Sin embargo, las mypes del sector producción fueron las más afectadas, registrando una caída en ventas por segundo año consecutivo, mientras que las del sector servicios lograron aumentar sus ingresos en 2.2%.