En estos últimos días he tratado de analizar, con la cabeza fría- al igual como lo hice cuando renunció a la Presidencia del Consejo de Ministros-, sobre el anuncio de César Villanueva Arévalo, de estar en la lista de AP (primero) y en APP (recientemente). Para algunos, esto fue buscar acomodos por intereses personales. Para otros, seguir trabajando con fe, pasión y perseverancia, por amor a nuestra región y de aquellas tierras olvidadas y saqueadas. Veamos los planteamientos, que han difundido los diferentes medios de comunicación social.
“Unidos, con pasión y perseverancia luchemos para lograr la descentralización que con urgencia necesita el Perú, solo así viviremos en un país justo y desarrollado”. Esto conlleva a formular prioritariamente una política de Estado orientada a fortalecer la verdadera descentralización que contenga como eje fundamental el reconocimiento de la diversidad en todo sentido. La solución integral a las necesidades por una GESTION DE GOBIERNO DESCENTRALIZADA. Esto amerita, plantear a los partidos políticos a entender la propuesta de las regiones: Primero, un país moderno no es centralista como sucede hoy. Segundo, las nuevas formas políticas de gobierno son dos: a) Sectorialmente (el presidente y sus ministros en el Consejo de Ministros);b) Territorialmente (el presidente y los gobiernos regionales y locales). Tercero, económicamente hay que transformar los recursos naturales, dándole un valor agregado con la mano de obra de los jóvenes. Todos estos planteamientos surgen de las diversas manifestaciones de César Villanueva: “La inversión privada no viene si tiene un escenario impredecible, tanto políticamente como también en la aplicación de las normas y quienes las califican; desde mi punto de vista, la prioridad más alta que tenemos es recuperar la confianza, la misma que no se logra con discursos sino con hechos concretos.” Y en cierta ocasión, le escuché decir: “El país se está desmoronado en calidad política por todos los lados, tanto desde el oficialismo como desde la oposición; por ello, tenemos que volver a recuperar la confianza en el país con planteamientos concretos”. Su integración a, Alianza para el progreso (APP), nace desde esas premisas. Y desde la plataforma regional- que no es un partido político- el ex presidente regional de San Martín sostiene que, “Creo firmemente que necesitamos una propuesta progresista alejada de los extremos de izquierda y derecha.” Paralelamente, está de acuerdo a que, “El tema de una reforma judicial es una necesidad vital para el país, sin eso, es difícil garantizar la seguridad ciudadana, por los hechos de impunidad que se están dando”
Entendemos, entonces, que su postulación obedece a “La plataforma regional, que es la unión de movimientos regionales de todo el Perú, que necesita articularse a una propuesta nacional firme, pero sería un canibalismo político que otra vez todos ellos se dispersen en distintas opciones, lo que hay que buscar si queremos que nuestro país sea moderno y desarrollado, es romper el centralismo con una descentralización igualmente moderna.” Estoy seguro que, para los que han perdido la fe en los políticos, esto suena a engaña muchachos. Sin embargo, hay quienes piensan como Villanueva: “Tenemos el potencial suficiente en nuestro país para estar en otra dimensión si es que trabajamos con una política no ideológica sino la del sentido común”, y como lo formula el ex presidente del Consejo de Ministros, “La inversión privada no viene si tiene un escenario impredecible, tanto políticamente como también en la aplicación de las normas y quienes las califican; desde mi punto de vista, la prioridad más alta que tenemos es recuperar la confianza, la misma que no se logra con discursos sino con hechos concretos.” Bien por César Villanueva.
La propuesta está hecha. Los electores tienen el poder en las urnas.