Gran consternación causó ayer por la mañana el emotivo adiós al suboficial de tercera Gustavo Aldair Chávez Acuña, de 26 años, quien perdió la vida mientras rescataba a dos personas en la localidad de San José de Sisa, en la provincia de El Dorado. La ceremonia fúnebre se realizó en la sede del Escuadrón de Emergencia 105, lugar donde el joven policía venía laborando desde hacía cinco meses.

El homenaje estuvo presidido por el general Milton Cabrera Ríos, jefe de la Región Policial San Martín, quien durante su discurso destacó la valentía y entrega del suboficial Chávez. Recordó que su conducta ejemplificó el espíritu del himno de la Policía Nacional, que reafirma el compromiso de servir y, de ser necesario, dar la vida por el Perú. Añadió que, allí donde exista peligro y personas en situación de riesgo, siempre habrá un policía dispuesto a proteger.

Luego de la ceremonia, el cortejo fúnebre partió rumbo a la base aérea de la Fuerza Aérea del Perú, acompañado por sus compañeros de unidad visiblemente afectados por la pérdida. A lo largo del recorrido se observaron muestras de respeto y profundo pesar por parte de los agentes que compartieron labores con el joven suboficial.

Entre los asistentes destacó la presencia de la esposa del suboficial Chávez, quien permaneció todo el trayecto aferrada a las prendas que él solía utilizar, evocando los recuerdos de su vida juntos. En brazos llevaba a su bebé de tan solo tres meses de nacido, quien también viajó acompañado de su madre y de los restos de su padre rumbo a Chiclayo.

El féretro fue trasladado a la ciudad de Chiclayo, donde se realizará el velatorio y posterior entierro. Familiares, amigos y miembros de la institución policial se preparan para darle el último adiós a un joven agente cuya vocación de servicio quedó marcada por su acto final de sacrificio. Por: Hugo Anteparra