La influenza A (H3N2) mantiene en alerta a los sistemas de salud a nivel internacional tras el aumento de contagios y hospitalizaciones en Europa y Estados Unidos, asociado a una nueva mutación denominada variante K. Frente a este escenario, las autoridades sanitarias del Perú informaron que se mantiene una vigilancia epidemiológica permanente, aunque no se han detectado casos de esta variante en el país.

El médico infectólogo Óscar Malpartida Tabuchi explicó que el virus H3N2 se caracteriza por su alta capacidad de mutación, lo que permite la aparición periódica de nuevas variantes frente a las cuales parte de la población no tiene defensas previas, facilitando su propagación. No obstante, precisó que no existe evidencia de que la variante K sea más grave que otras de la misma familia.

Según la Sala Situacional del Ministerio de Salud (Minsa), hasta la semana epidemiológica 49 (6 de diciembre) se han registrado en el país 609 casos confirmados de influenza A (H3N2). El monitoreo semanal busca detectar oportunamente cambios en el comportamiento del virus o el ingreso de nuevas variantes.

El ministro de Salud, Luis Quiroz, llamó a la calma, pero exhortó a la prevención, especialmente entre las personas más vulnerables. Advirtió que, aunque la mayoría de casos cursa de manera leve, las complicaciones pueden derivar en neumonía, sobre todo en niños pequeños, adultos mayores y personas con enfermedades crónicas.

La influenza H3N2 es un subtipo de la influenza A y presenta síntomas como fiebre alta, tos seca, dolores musculares, escalofríos, malestar general y secreción nasal, pudiendo evolucionar en casos graves a neumonía viral. Los especialistas señalan que no es posible identificar la variante solo por los síntomas, por lo que se requieren pruebas rápidas o moleculares, y estudios especializados para confirmar subtipos, a cargo del INS y el Minsa.

Ante las fiestas de fin de año, el Minsa reforzó las recomendaciones de vacunación contra la influenza, lavado frecuente de manos, ventilación de ambientes, uso de mascarilla en caso de síntomas respiratorios y evitar el contacto con personas enfermas. La Organización Mundial de la Salud (OMS) reiteró que la vacunación estacional sigue siendo clave para reducir hospitalizaciones y cuadros graves.

Hasta el momento, Perú no reporta casos de la variante K, pero el contexto internacional obliga a mantener la vigilancia activa y la prevención constante.