El joven abogado Vincenth Saavedra Montes, destacado representante del aprismo en San Martín, no sólo por su trayectoria partidaria y política, como haber sido el Gobernador Regional más joven del Perú a los 24 años, sino principalmente por su vasta preparación intelectual y doctrinaria, aunada a un carisma personal que ha motivado que sea voceado por muchos apristas de las viejas y nuevas generaciones como el candidato natural del Apra para el Congreso en las próximas elecciones generales del 2016, accedió a concedernos esta entrevista en la que no sólo hemos tratado de conocer al político joven y prometedor, sino, sobre todo, al ser humano, al esposo amante y al padre cariñoso con sus pequeños hijos, que usualmente es una faceta no muy conocida por el gran público sanmartinense en sus políticos, salvo cuando se suscita algún escándalo que los deja por lo general muy mal parados. En esta conversación, Vincenth Saavedra revela algunos aspectos de su personalidad que seguramente serán de interés para muchos.
Vincenth, ¿Qué sientes cuando en algunos medios de comunicación, te conoce como el “vocero aurelista”?
No entiendo por qué, Aurelio Pastor no sólo es mi compañero de partido, sino principalmente mi amigo y coincidimos en un equipo de trabajo que tiene una visión común de desarrollo para San Martín. No creo que Aurelio necesite de voceros, pues tiene la suficiente capacidad para hablar por sí mismo como el político de calidad y experiencia que es.
¿Por qué pensar que un Frente Social convocado por el Apra podría solucionar los problemas del Perú y de San Martín?
Porque como dice su slogan: “La alianza es con los pueblos”, por lo cual no podemos ser sectarios como ciertas izquierdas extremistas. Nuestro partido en el gobierno el 2016, no puede ni debe gobernar solo, pues es fundamental que participen en la reconstrucción nacional otros peruanos con la misma vocación de redimir a nuestro pueblo consiguiendo la justicia social plena, lo que se traduce en mejorar sustancialmente la calidad de vida de todos los peruanos.
¿Qué opinas de ciertas candidaturas que se han lanzado en el Apra de la región San Martín?
¿Candidaturas a qué?
Al Congreso el 2016, claro.
En democracia todos tienen derecho a expresar sus aspiraciones, pero el Apra y su convocatoria a través de un Frente Social tienen otra misión en esta coyuntura histórica y por eso es que no es el momento oportuno para hablar de candidaturas. Primero debemos pensar en San Martín, escuchando a las organizaciones de base, a los dirigentes sociales, grupos organizados y todo nuevo espacio emergente en la sociedad, así conectamos con el pueblo, porque el peruano y en particular el sanmartinense necesita de representantes que estén en la capacidad de generar propuestas serias y viables. Esto no es un circo, estar en el Congreso es una gran responsabilidad que algunos improvisados han olvidado y que debemos recuperar diferenciando a quienes actúan por figuretismo y a quienes quieren servir a la Nación.
¿Cómo consigues armonizar tu trabajo profesional y tu vida familiar con la actividad política?
Un ciudadano responsable debe contribuir con la sociedad a través de la ocupación que realiza, sea o no profesional, lo que cuenta es que sea una ocupación honesta y productiva, por eso Haya de la Torre habló de los trabajadores manuales e intelectuales. Yo, como la gran mayoría de los peruanos, tengo que trabajar para mantener a mi familia, y en esta labor debo cuidar que mi actividad profesional no interfiera ni material ni éticamente con la opción política que he elegido. Hay que tratar de darse tiempo para todo y si uno ha elegido la acción política tiene que sobreponerse a las presiones de tiempo del trabajo y responder con inteligencia y eficacia a los desafíos de la política. Yo creo que un político no puede prescindir del respaldo moral y emocional que recibe de su familia, pues el cariño y comprensión de los tuyos es, según mi experiencia, los pilares en que cualquier hombre debe apoyarse para conseguir sus objetivos. Algunos quieren presentarse como paradigmas en política, pero descuidan a sus hijos. No hay nada más importante para todo hombre que el bienestar de su familia y con eso me estoy refiriendo también a aquellas mujeres que siendo madres solteras o divorciadas se sacrifican de forma admirable por sus hijos, como no lo hacen algunos que se creen muy hombres por la cantidad de mujeres e hijos que tienen y a los que abandonan. El que ama a su familia tiene la capacidad de amar a su pueblo.
Por: Alvaro Reinoso