No sé si es estrategia o nos quieren llenar las redes sociales (sobre todo) de las broncas entre dos hermanos que buscan protagonismos de ser el o la hija preferida.
Y es que los hermanos Fujimori han dado mucho que hablar en los últimos meses, desde antes de la vacancia presidencial cuando el hermano menor, menos experimentado y novel en política, empezó a hacer contra a la hermana mayor que lidera un grupo del partido naranja.
Todo comenzó con la rebeldía del hermano menor cuando empezó a dar declaraciones y tomar decisiones en el Congreso en contra de las posiciones del partido que le llevó al hemiciclo, abteniéndose a votar ante ciertas determinaciones de Fuerza Popular.
Pero la división o la estrategia se dejó sentir más aún en la actuación del benjamín de los Fujimori en la votación de la vacancia presidencial, que a decir de muchos ha sido una negociación debajo de la mesa, para salvar a PPK, pues él mismo, a través del twitter, que es por donde más se pronuncia, considera como a los “Avenger” a los congresistas naranjas que “fueron lo héroes de la democracia”, al permitir la permanencia de Kuczynski en la presidencia.
El último show ha sido la permanencia de los asesores de Keiko Pier Figari y Ana Hertz en Fuerza Popular, ya que, a decir de Kenji, son quienes conspiraron contra la libertad de su padre, Alberto Fujimori, y desde la sombra atentan contra la gobernabilidad (como manifestó textualmente en su twitter) y ver luego un comunicado del partido que renueva la confianza, determina la continuidad de la guerra no declarada.
Más aún, ver el panel de agradecimiento a PPK por la libertad de su padre en algunas calles de Lima, nos da el mensaje que el arreglo estaba dado.
Podemos ver que, una vez más, los interese personales y de partido priman ante la gobernabilidad y que este circo mediático, en el que nos tienen acostumbrados y que es pan de todos los días, tiene para más funciones.