Afirma que su padre le dejó la gerencia ejecutiva del hotel, pero que sus familiares tomaron decisiones en otra dirección…
Por: Pedro Chauca Ortiz
Carlos Martín González Lupis, hijo mayor del desaparecido empresario Carlos González Henríquez, manifestó que se “encuentra sumamente preocupado por el robo sistemático que estarían efectuando algunos empleados que laboran en el Hotel Puerto Palmeras, y que ya es necesario ponerle fin a este comportamiento mafioso”.
Visiblemente mortificado, Carlos González Junior subrayó que el patrimonio que dejó su padre, se viene sustrayendo y dilapidando sistemáticamente, aprovechándose de la ausencia de control, de la falta de supervisión y de un ejercicio responsable de la gerencia general, como lo hacía en vida su señor padre. Añadió, que en complicidad con sus familiares y la policía, los empleados, han logrado evitar, que él tenga acceso a las instalaciones del hotel, para mantenerlo alejado y así no pueda realizar el control que su cargo de gerente ejecutivo, que le dejó su padre, le otorga y que ha sido revocado.
La gerencia ha dispuesto que no se le permita el ingreso a su propiedad y centro de trabajo, al igual que a otras personas..
Carlos González Jr. indica que existe un pésimo comportamiento de su familia, por el mal manejo que vienen ejerciendo en la administración de la Corporación Turística Amazónica, que se encuentra prácticamente en abandono, y lejos de permitirle que contribuya en la administración y reconocerle el rol gerencial que le otorgó su padre y el derecho que le corresponde como legítimo heredero, vienen manipulando documentos con la complicidad de malas autoridades y funcionarios, con el afán de despojarlo de sus derechos inalienables.
“Exijo a las autoridades pertinentes en Lima examinar y revisar el proceder del notario Cisneros Olano de Tarapoto ya que no es la primera vez que está vinculado con manejos poco trasparentes en el ejercicio de su función pública, habiendo ya sido cuestionado en más de una oportunidad”, manifestó Carlos González Jr.