Un comerciante del distrito de Soritor de la provincia de Moyobamba fue intervenido ayer en la madrugada por ronderos de esa localidad, tras ser sindicado de ultrajar sexualmente a un niño de once años de edad. El hecho causó conmoción, porque el denunciado es una persona conocida en esa jurisdicción y dueño de un establecimiento comercial.
Amelecio Américo Ortiz Chávez de 65 años de edad, tras ser intervenido por los ronderos aceptó haber ultrajado al niño natural del caserío Pomalca, aduciendo que el menor le insinuó para mantener relaciones sexuales, versión que fue desmentido por la víctima, quien indicó que el comerciante lo violó en varias oportunidades, tras amenazarle de asesinar a sus padres si no acude las veces que le hace llamar.
Por determinación de asamblea, los ronderos liderados por Ronsendo Vargas Meléndez, acordaron pasear al comerciante detenido por las principales calles de Soritor, para que la población conozca el motivo de su detención, es por ello que le colocaron dos carteles en el cuerpo indicando lo siguiente “Yo violé a un niño”.
Ortiz Chávez fue conducido al frontis de la Comisaría de Soritor, para luego ser llevado a la plaza de Armas, en todo momento permaneció agachado y señaló mostrar arrepentimiento de haber ultrajado al niño, a quien le pidió que le ayude a mover unas cajas para ganar una propina, y cuando ambos se quedaron solos se produjo la violación.
“Cuando terminamos de arreglar unas cosas de mi negocio le pedí al menor que se vaya a bañarse, pero al ver que se demoraba fui a buscarle y es ahí donde me cogió de mi miembro y luego se agachó, que podía hacer yo en ese momento” trató de justificar su hecho delictivo, ante el repudió de los ronderos y familiares del niño.
El comerciante permanecerá en el calabozo del comité de ronderos Cementerio Tangumí, este lunes será puesto a disposición del Ministerio Público para que sea procesado de acuerdo a ley, ya que el resultado del médico legista salió positivo. (Hugo Anteparra)