El uso de las redes sociales dentro de campañas políticas se da principalmente para amplificar la información. Es decir, se traslada el contacto en las calles y se coloca la foto de los recorridos o se colocan extractos de las visitas puerta a puerta. Las características de cada red social permiten determinar qué tipo de audiencia se abarcará y cuál es el lenguaje propicio por utilizar en cada una.
Gabriela Baquerizo, doctora en comunicación y docente investigadora, indica que no es obligatorio utilizar todas las redes, sino las necesarias en función al público al que se deban acercar. “Se debe tener claro el objetivo, ¿qué voy a hacer, a quién me voy a dirigir y dónde se encuentran digitalmente? Utilizar todas las plataformas no implica que sea una mejor campaña”, detalla.
Un punto clave en el uso de las redes por parte de un candidato el usuario busca interacción y diálogo, “la comunicación digital no es unidireccional, las redes son canales de participación”, explica. Y añade que, en una red el candidato está a la altura del ciudadano.
También destaca la importancia del mensaje, en el que las publicaciones proselitistas difícilmente tendrán cabida. “Se debe establecer una estrategia de contenido con formatos digitales, como infografías, audio o videos, que nos presenten propuestas claras. Si la estrategia es subir fotos de entrega de regalos o abrazos no tendrá acogida” Además, el mensaje debe ser del lenguaje indicado según la red.
Estudiar antes que suponer
La experta consultada en el área de la comunicación política digital reconoce que los candidatos deben centrar una estrategia de campaña para generar contenidos.
No obstante, la interacción digital no representa un compromiso. En otras palabras, darle me gusta a un video o retuitear una publicación no se traduce a un voto.
“Los candidatos deben estudiar realmente si los indecisos se encuentran en redes o no”. Según un sondeo de la última semana más del 50 por ciento de la población no tiene decidido por quién votar y cerca del 30 por ciento no tiene agrado por ningún candidato.
Las redes sociales y la conectividad en el país presentan problemas de alcance.
Porcentaje que debió aumentar a causa del confinamiento. Las asociaciones de proveedoras de servicios de telecomunicaciones proyectan un incremento del 30 por ciento. Aun así, la campaña política digital abarca un buen porcentaje de la población, aquella que tiene conectividad. Por esto, algunos expertos en el área electoral estiman un gran nivel de confrontación y mal uso de este recurso que, en vez de orientar, confunde en vez de ilustrar denigra en el meme y la burla, sentencia la Baquerizo.