Ayer, a las 11 de la mañana, una nueva torrencial lluvia azotó la localidad de Nueva Unión, en el distrito de Caspizapa, provincia de Picota. Al igual que en semanas anteriores, el desborde de un canal de riego y una quebrada anegó un tramo de la carretera Fernando Belaúnde Terry, generando caos y dificultades para el tránsito.
Imágenes difundidas en redes sociales muestran la magnitud de la inundación, con la carretera completamente cubierta por el agua. Decenas de vehículos, tanto particulares como de transporte público, quedaron varados durante varias horas, a la espera de que el caudal disminuya lo suficiente para poder continuar su recorrido.
Los pasajeros de los buses interprovinciales fueron los más afectados, expresando su frustración por los retrasos y las incomodidades causadas por las inclemencias del tiempo. A pesar de las difíciles condiciones, los conductores de vehículos menores fueron los primeros en aventurarse a cruzar la zona inundada, aprovechando los momentos en que el caudal bajaba.
En ambas márgenes de la carretera, se observaron extensas áreas de cultivo inundadas, lo que representa una nueva pérdida económica para los agricultores de la zona. De continuar las lluvias nuevamente se podría restringir el tránsito vehicular a unos 70 kilómetros al sur de Tarapoto. (Hugo Anteparra)