Por: Edwin Rojas Meléndez
La presente leyenda escrita por Jenaro E. Herrera y publicada en Leyendas y tradiciones de Loreto (páginas de 53 a 59). Aborda un tema de siempre actualidad en la ciudad de Moyobamba, en razón de que los barrancos (inigualables jardines urbanos) han sido invadidos, rellenados y descuidados, quitando a la ciudad de áreas de oxigenación y preservación de la biodiversidad. Aquí una transcripción resumida de la leyenda.
Origen de los barrancos de Moyobamba
“Los terrenos del departamento de Loreto y San Martín, en la sección llanura, pertenecen en su formación geológica a la serie sedimentaria del Triásico; son terrenos de aluvión, mezclados con arcilla roja, greda y algunos silicatos; y tanto Moyobamba como Iquitos se hallan expuestas a que la acción de las corrientes de agua inevitables con las frecuentes lluvias, formen grandes barrancos en el circuito urbano.”
¿Cuál fue el origen de los barrancos?
“He aquí lo que nos refirió don Juan José Pinedo, alias Buchico, que nació en 1737 y murió en 1867, a los 130 años de edad. Díjonos que durante el año 1804 la planicie sobre la que se eleva Moyobamba era eternamente llana, no existiendo dentro de ella cuesta ni bajada, más que las de Rumiyacu (agua de piedras) y Tahuishco en el Mayo, para descender y subir a los ríos de esos nombres; y que durante ese año (1804), hubo un fuerte terremoto que echó a tierra las dos torres de la Iglesia Matriz, así como el altar mayor, con cuyo motivo, el señor don Pedro María Vásquez Caicedo, mandó traer a sus expensas, desde Trujillo albañiles macuitos (negros), quienes construyeron de yeso el altar mayor y levantaron las dos torres fabricando adobes pequeños.”
Desaparece el volcán, nacen los barrancos y la quebrada Indañe
“Fue entonces que se abrieron grandes grietas en el área urbana de la ciudad, las que, con el transcurso del tiempo y corriente de las aguas, han dado por resultado la formación de los grandes barrancos y la desaparición del volcán que había en la cabecera de Azungue, que hoy se le conoce con el nombre de Timbuc (agua que hierve), donde existe una fuente de agua termal y a sus inmediaciones hay varias vertientes de agua salobre. Y desde entonces data también la quebrada que hoy se denomina Indañe que antes no existía.”
La tradición y la historia
“Hasta aquí el exclusivo imperio de la tradición, y consultando ahora la historia, vemos que el 4 de enero de 1803 el volcán Cotopaxi, del Ecuador, hizo esa fecha su novena erupción, y que el 16 de junio de 1805 hubo un terremoto que destruyó totalmente la Villa de Honda, y parte de la ciudad de Popayán (Colombia) cuyos efectos debieron hacerse extensivos, asimismo a la provincia de Maynas. Los misioneros jesuitas, nos refieren que en año 1698 los volcanes Cotopaxi y Carguaraicu hicieron erupción y fueron tales los destrozos y victimas que ocasionaron en la provincia de Maynas, que, espantados los misioneros viendo las lavas bajar por el río Marañón y sus afluentes Morona y Pastaza, creyeron que iba a concluir el mundo y comenzaron a prepararse para ello escribiendo pavorosas relaciones de lo que espectaban.”
Barrios y barrancos
“El área de la ciudad de 7,449 km2, está dividida en cinco barrios denominados Lluichucucha (lago del venado), Zaragoza, Belén, Calvario y Pacchahuaico e interceptada por siete grandes barrancos: Tumino, Shango, huasta, Tipinillo, Belén, Mercado y Caparina. El barranco Tipinillo origina las dos mejores fuentes de agua potable de la ciudad, conocidas como Veranillo y Caparina, siendo la principal fuente la denominada Fachín, por estar ubicada cerca a la casa de la familia de ese apellido. Existe además otra fuente conocida como Padrepaccha (chorro del Padre), situado en el barrio de Calvario, descubierta por el presbítero José María Arbildo que fue el primer cura de la capilla del Perdón.”
Colofón
Sobre el tema barrancos, se ha publicado la Ordenanza Municipal No. 558-MPM de 7 de diciembre de 2023 que declara a los Barrancos de la ciudad de Moyobamba como zonas intangibles de uso exclusivo para reforestación, preservación y ecoturismo. También se tiene un interesante expediente para declaratoria de Áreas de Conservación Ambiental a los Barrancos de la ciudad de Moyobamba, que promoverá la intervención en 11 barrancos. Elaborado por el Colectivo Moyobamba 500 Años (CM500A) y la Autoridad Regional Ambiental (ARA). Pero los barrancos no solo son pulmón de la ciudad y refugio de vida animal y vegetal, son también, cajones de recuerdos y nostalgias de viejas generaciones, que cuando niños corretearon en sus laderas jugando la “pistoleada”, y más de una vez, refugio seguro para arrebatos adolescentes y pasiones imborrables propias de la infidelidad. Eran tiempos en que los hoteles eran para pasajeros, no para “pisajeros”
Bibliografía.
Genaro Herrera. Leyendas y tradiciones de Loreto. Segunda edición. Dirección Regional de Educación de San Martín y Editores Asociados. Moyobamba, San Martín, Perú, 2003.
El próximo sábado: Las yaras o chuaras.