El domingo por la tarde se incendió su vivienda, por razones que está en investigación. Afortunadamente nadie salió herido y solo se reportó daños materiales.
En un desgarrador incidente, Carmela Romero Ruiz, madre de tres jóvenes, enfrentó la devastación de perderlo todo en un incendio que consumió su hogar en la localidad de San Roque de Cumbaza. Sin embargo, en medio de la tragedia, un rayo de esperanza iluminó su camino cuando descubrió que su principal herramienta de trabajo, crucial para su sustento y el de su familia, había quedado intacta.
La máquina para hacer pasta de cacao, fundamental para su actividad económica, se mantuvo milagrosamente intacta, ofreciendo a Carmela Romero una oportunidad para reconstruir su vida después de la pérdida abrumadora que enfrentó hace unos días.
El apoyo y la solidaridad no tardaron en llegar. Ayer por la mañana, Carmela recibió un gesto conmovedor por parte de las integrantes de la asociación de damas Manos Unidas. Ellas entregaron colchones, ropa y 300 soles, de esa manera brindándole un respiro en medio de la adversidad y mostrando la fuerza de la comunidad en tiempos difíciles.
Mirian Pinchi Daza, presidenta de este colectivo de damas solidarias, destacó la admirable determinación de Carmela para sobreponerse a la tragedia. Asimismo, expresó su sorpresa ante el hecho de que la herramienta de trabajo vital para Carmela se salvó milagrosamente del fuego.
Carmela, por su parte, compartió su firme compromiso de luchar por el bienestar de sus hijos y agradeció cualquier ayuda adicional que la comunidad pueda brindar. Para ello, proporcionó un número de contacto (980 608 469) a través del cual le pueden apoyar con un depósito mediante el Yape. (Hugo Anteparra)